Sustentabilidad
Chile lidera el ranking sudamericano de países que más residuos genera. Según un estudio del Banco Mundial, en nuestro país cada habitante forma 1,15 kg de basura al día, lo que nos posiciona en segundo lugar de Latinoamérica, superados solo por México.
Cuando hablamos de reciclaje lo común es pensar en los materiales típicos que se disponen en puntos limpios como botellas plásticas, latas, vidrios o cartones. No obstante, a la hora de combatir el cambio climático, el reciclaje de orgánicos podría cobrar mayor relevancia ya que cerca del 60% de los desechos que se depositan en un basurero domiciliario corresponden a restos de comida como cáscaras de fruta, que al terminar en rellenos sanitarios generan Gases de Efecto Invernadero (GEI) altamente contaminantes para el medio ambiente.
El Programa Reciclo Orgánicos, fruto del Acuerdo de Cooperación Ambiental que sostienen los gobiernos de Canadá y Chile, indica que lo primero que debemos comprender es que los restos de comida no debieran terminar en la basura, sobre todo porque mientras más de 820 millones de personas padecen hambre, el 14% de los alimentos del mundo es desperdiciado.
Adicionalmente, cuando llegan a rellenos sanitarios comienzan a descomponerse producto de la acción de bacterias y ,en condiciones sin oxígeno, generan GEI como el Gas Metano (CH4) cuyo potencial de calentamiento global es 28 veces más alto que el Dióxido de Carbono (CO2). Por esa razón, el reciclaje de residuos orgánicos contribuye directamente a reducir las emisiones de GEI y, con ello, a mitigar el cambio climático
“La finalidad de este programa es incorporar el reciclaje de la fracción orgánica a lo largo de Chile, a través del apoyo en la implementación de plantas de compostaje, biodigestores anaeróbicos o la captura de gas desde relleno sanitario, tanto en el sector público como privado y en diferentes comunas del país. Hoy estamos participando en más de 20 proyectos a partir de los cuales se espera reducir alrededor de 7 millones de toneladas de CO2 en el periodo comprendido entre 2020-2040”, explicó el coordinador general, Gerardo Canales.
Según el documento entre las técnicas de reciclaje de orgánicos están:
Compostaje: El compostaje es un proceso biológico de descomposición de la materia orgánica para obtener compost. El compost es un abono natural creado a partir de la acción de bacterias, hongos y microorganismos sobre los residuos orgánicos. Esta técnica es ideal para quienes viven en casa y cuentan con patio.
Vermicompostaje o Lombricultura: Es una técnica para la transformación de la materia orgánica, por medio de la acción combinada de lombrices californianas, en humus, un excelente fertilizante natural. Esta técnica es ideal para quienes viven en departamentos o espacios más reducidos.
Biodigestión o Digestión Anaeróbica: Es un proceso biológico que consiste en la degradación de materia orgánica por bacterias en ambientes anaeróbicos (es decir, sin presencia de oxígeno) para transformarlas en biogás y digestato (fertilizante natural).Esta técnica es recomendada para tratamientos industriales ya que requiere de mayor conocimiento técnico, no obstante, también se puede aplicar a nivel de vivienda o predio.
Para aprender a compostar o vermicompostar a nivel domiciliario, el Programa Reciclo Orgánicos cuenta con variado Material Educativo a disposición en https://reciclorganicos.com/involucramiento/educar/material-educativo/ como la Guía de Compostaje Domiciliario, en donde se explica paso a paso cómo realizar este proceso en el propio hogar.
El Ministerio del Medio Ambiente realizó el año pasado una nueva versión de la Encuesta Nacional Ambiental, la cual se hizo pública recientemente y da cuenta de la percepción de la ciudadanía en los principales problemas ambientales que afectan a los habitantes, como la contaminación del aire (32,8%) y la basura (29,7%) siendo los de más urgente preocupación.
Por otra parte, el estudio demostró que cerca de la mitad de la población no cree que el hábito de usar productos desechables tenga un impacto significativo sobre el medio ambiente. En este contexto existen actualmente variadas formas de contribuir al mejorar esta situación.
Para lograr reducir el desperdicio de sus alimentos en un 50% Sodexo realiza, por ejemplo, su programa WasteWatch. Este porcentaje representa un ahorro de alrededor de 2.468 toneladas de comida, impulsando un cambio cultural y de comportamiento en la cocina y en los residuos de los platos de los consumidores.
Carolina Bustos, jefa de Responsabilidad Corporativa de la compañía, afirma que “la realidad respecto a la reutilización y los envases desechables preocupa, así como también la baja cultura de reciclaje que existe aún en los chilenos. Es nuestra responsabilidad colaborar con el cuidado del planeta y la reducción de contaminación”.
Si bien reciclar los desechos es una buena manera para contribuir al medio ambiente, es mejor aún atacar el problema de raíz y reducir los desechos que generamos día a día, afirma Bustos, y aconseja que una buena idea es practicar el consumo responsable en casa, por lo que propone una serie de medidas para disminuir la producción de basura esta se basaría en programa de Las 3r el cual consiste en Reducir Reutilizar y Reciclar.
Además, recomienda otras medidas como usar bolsas de telas en lugar de las plásticas, comprar productos lácteos en envases retornables y preferir el consumo desde los agricultores que ofrecen productos frescos y sin envases de plásticos. “Por otro lado, evitar comprar bebidas embotelladas innecesariamente ya que son la principal fuente de contaminación ambiental”.
Como parte de su línea de acción, Outlife (empresa especializada en el desarrollo y administración de espacios outdoor) junto a Fitux (una organización que busca impactar en nuestra sociedad de manera ambiental, económica y deportiva) lanzaron una campaña que busca llamar a los deportistas a donar sus prendas y accesorios deportivos en desuso, y en buen estado.
“Nuestro principal objetivo con esta campaña es poder llegar a más personas que quieran donar sus artículos, zapatillas y/o ropa deportiva en desuso y buen estado. Estas donaciones ayudan a financiar proyectos deportivos gratuitos bajo el concepto “Reutiliza. Dona deporte”. Por ejemplo, si recibimos 3.700 donaciones eso se traduce en 40 niños entrenando de manera gratuita”, así lo indica Trinidad Prieto, directora comercial de Fitux.
Quienes acudan a realizar deporte a los parques administrados por Outlife, RKF El Durazno y parque Outlife Chamisero, ubicados en las comunas de Lo Barnechea y Colina, respectivamente, podrán depositar su donación en los contenedores de Fitux que estarán disponibles en las tiendas de dichos parques.
