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Se acabó el verano pero el cáncer de piel sigue siendo un riesgo: prevenir es fundamental Salud

Se acabó el verano pero el cáncer de piel sigue siendo un riesgo: prevenir es fundamental

Uno de los cánceres más frecuentes en el último tiempo el cáncer de piel melanoma, por ello es de crucial importancia hablar de su identificación y prevención. Plan piloto en establecimientos educacionales busca generar hábitos de cuidado de la piel desde edades tempranas. El objetivo para fines de 2023 es alcanzar 35 entre establecimientos educacionales públicos y privados de educación escolar y universitaria. En muchos casos, gracias a una detección temprana, el cáncer de piel se puede prevenir.


Según la OMS en los últimos 10 años se han duplicado los casos de cáncer a la piel en Chile, con más de 850 casos de melanoma diagnosticados al año cerca de 370 personas fallecen en ese mismo periodo producto de esta enfermedad, y este tipo de cáncer ya es el 3ro en importancia en Chile. 

Con el propósito de generar un impacto positivo Felipe DelPino y Cristian Vargas crearon una plataforma digital que protege a los trabajadores con la medida exacta de protector solar, de la mano de una estrategia de seguimiento agudo con un enfoque personalizado.

Inicialmente con operaciones en Minería y Construcción, Carebox Lab ha creado una nueva área de desarrollo dirigida a establecimientos educacionales, con el propósito de generar hábitos de cuidado de la piel desde edades tempranas. Lograr este propósito será de gran importancia para disminuir la probabilidad de un futuro cáncer a la piel en los estudiantes de hoy. 

El plan piloto se realizará en The English Institute, y el objetivo de la startups es sumar para fines de 2023 a 10 establecimientos de educación escolar y 5 universidades, que se traduce aproximadamente en 35 mil alumnos. En tanto, para fines de  2024, esperan tener 20 colegios y 5 universidades, impactando en la salud de 45 mil alumnos más.

Así lo expone Cristian Vargas, gerente Innovación y cofounder de Careboxlab:  “Actualmente en gran parte de la población no existe un hábito de cuidado diario respecto a la aplicación de protector solar y lo hemos confirmado con la trazabilidad que hemos realizado en el uso del protector, en donde solo un 39% se aplica las 3 dosis diarias exigidas por la Ley 20.096, que rige los peligros de la exposición al sol”.

“Alcanzar indicadores acerca de la masa crítica de personas diagnosticadas de cáncer de piel es vital para nosotros y que el uso de protector ya no sea una obligación, sino que sea un hábito normalizado en las vidas de cada uno”, agrega.

En una mirada de mediano y largo plazo, su meta es que al  2030 estén con su tecnología en todo el territorio nacional, alcanzando al 75% (1.875.000 de 2.500.000) de la población de colaboradores expuestos a los rayos UV. Y además cruzar las fronteras a Perú, Brasil y Colombia.

El cáncer de piel se puede prevenir

 Las altas temperaturas y altos niveles de radiación es peligrosa. Durante el verano la Fundación Arturo López Pérez (FALP) lanzó una campaña para concientizar sobre la importancia de la prevención de esta patología, el cáncer más común en el mundo y en Chile.

La idea es fomentar conductas de autocuidado desde la infancia, como el uso de protector solar contra radiación UVA/UVB, de al menos FPS 30, tres veces al día; evitar la exposición solar entre las 11.00 y 16.30 horas, y la incorporación de ropa y elementos de protección cada vez que se está al aire libre. Esto último, principalmente en aquellos trabajos y/o disciplinas deportivas que se realizan al exterior. Por ejemplo, agricultura, construcción, pesca, atletismo y fútbol, solo por nombrar algunos.

Nueve de cada diez personas con cáncer de piel lo desarrollan debido a la sobreexposición al sol, conducta que está asociada a momentos de felicidad por relacionarse con las vacaciones, la playa, el campo o la vida al aire libre.

Sin embargo, según Leonardo Peruilh, dermato-oncólogo de FALP, “olvidamos que al exponernos a la radiación UV solar, como también de solárium, estamos favoreciendo el envejecimiento prematuro y aumentando los riesgos de desarrollar cáncer de piel, ya sea del tipo no melanoma (carcinoma basocelular y carcinoma de células escamosas) o melanoma. Este último es el más agresivo y mortal”.

En este sentido, el especialista advierte que “promover y reforzar transversalmente en la comunidad  la adhesión a conductas saludables y responsables del cuidado de nuestra piel es prioritario. La fotoprotección constante puede reducir el riesgo de desarrollar cáncer de piel no melanoma en aproximadamente un 40%, y en un 50% el del tipo melanoma”.

Tasa de mortalidad al alza

Según proyecciones del Observatorio Global del Cáncer (Globocan 2020), plataforma web de la Organización Mundial de la Salud, en Chile, anualmente se diagnostican más de 800 nuevos casos de cáncer de piel, solo del tipo melanoma. 

De acuerdo a las últimas cifras publicadas por el DEIS, durante los últimos 10 años (2012-2022) la tasa nacional de mortalidad específica por cáncer de piel se ha incrementado en un 22%. Esta cifra es preocupante si se tiene presente que se trata de una de las patologías oncológicas más prevenibles. ¿Cómo? A través del cambios de hábitos nocivos e incorporando conductas de autocuidado como las señaladas anteriormente.

Anualmente, el impacto del cáncer de piel se hace sentir con fuerza tanto en el norte, centro y sur de nuestro país. Así, según la data recopilada y publicada por el DEIS, en 2022 Arica y Parinacota registró una Tasa Ajustada de Mortalidad (TAM) de 6,6, la mayor del país: es decir, por cada 100 mil habitantes, 7 murieron por cáncer de piel. Le siguen Antofagasta con una TAM de 5,07, Magallanes y la Antártica Chilena, y Coquimbo con una TAM de 4,97 y 4,87, respectivamente. Más atrás, se ubican Biobío, Ñuble, O’Higgins, Valparaíso, Maule y Araucanía, regiones que también sobrepasan la Tasa Ajustada de Mortalidad nacional.

De las más de 530 muertes registradas por esta enfermedad el año pasado en Chile, el 53% correspondieron a hombres y el 47% a mujeres.

En cuanto al rango etario con mayor número decesos, el 47% fue de personas entre los 80-99 años y 35% entre los 60-79. En relación a este último punto, el Dr. Peruilh explica que “los daños que produce la radiación solar son acumulativos en el tiempo, por lo cual, tanto la incidencia como la mortalidad de esta enfermedad aumentan en adultos mayores”.

A pesar de esto, el especialista enfatiza que “es fundamental protegerse desde la infancia hasta el final de la vida, porque a pesar de que no es lo más habitual, el cáncer de piel también se presenta en personas más jóvenes, en especial el de tipo melanoma”.

Cualquier persona puede desarrollar cáncer de piel aunque no tenga un factor de riesgo, pero las probabilidades de padecerlo aumentan en personas que:

  • Tienen la piel clara.
  • Han sufrido quemaduras solares en la infancia.
  • Pasan muchas horas al sol (por ocio o trabajo).
  • Se exponen al sol de forma intensa en cortos períodos de tiempo (vacaciones).
  • Utilizan o han utilizado cabinas de bronceado.
  • Presentan más de 50 lunares.
  • Tienen una historia familiar de cáncer de piel.
  • Tienen más de 50 años.
  • Han sido trasplantadas de algún órgano.

También pueden servir como señales de advertencia, el cambio en la superficie de un lunar, comezón y/o sensibilidad en un lunar, la propagación del pigmento en el borde de una mancha hasta la piel circundante y por último, una herida que no termina de cicatrizar.

 

 

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