Salud
Los factores de riesgo que determinan la patología incluyen hipertensión arterial, niveles elevados de triglicéridos, niveles bajos de colesterol HDL, obesidad abdominal y resistencia a la insulina. Esta afección puede ser prevenida con una dieta saludable y ejercicio regular. En casos de obesidad y sobrepeso, la cirugía bariátrica ha probado ser muy efectiva para controlar el síndrome metabólico.
“El 41,2% de la población de 15 años y más cumple con los criterios de síndrome metabólico (SM), de acuerdo a la última Encuesta Nacional de Salud realizada en Chile (2016-2017)”, asegura Cristóbal Guixé, director de la Sociedad Chilena de Cirugía Bariátrica y Metabólica.
“Eso es un ascenso muy complejo de 5,9 puntos respecto de la anterior realizada 6 años antes que mostró que el 35,3% de la población cumplía con esos criterios. Esto es grave porque el SM engloba una serie de anormalidades metabólicas que determinan un mayor riesgo de padecer enfermedad cardiovascular y diabetes mellitus (DM)”, explica
Los factores de riesgo que determinan el síndrome metabólico incluyen hipertensión arterial, niveles elevados de triglicéridos, niveles bajos de colesterol HDL, obesidad abdominal y resistencia a la insulina. Se cree que esta afección afecta a más del 20% de la población mundial, coincidiendo con la prevalencia nacional.
Según el Dr. Guixé, “la obesidad abdominal es una condición fundamental en su desarrollo, por medio de una serie de mecanismos que interrelacionan sus distintos componentes”.
La acumulación de grasa alrededor del abdomen puede hacer que el cuerpo sea menos sensible a la insulina, la hormona que regula el azúcar en la sangre, lo que puede llevar a un aumento del nivel de esta última y, con el tiempo, a la aparición de la diabetes tipo 2. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2016 más de 650 millones de adultos tenían obesidad, y más de 420 millones de personas vivían con diabetes en todo el mundo.
Como complemento, un informe publicado en 2023 por la Organización Panamericana de la Salud plantea que “a nivel mundial, la mortalidad por diabetes ha aumentado un 70% desde el 2000 y esta enfermedad es una de las diez causas principales de muerte en todo el mundo. En la Región de las Américas, 284.049 personas murieron por diabetes en el 2019, con una tasa de mortalidad estandarizada por la edad de 20,9 por 100 000 habitantes”.
Por otro lado, un estudio de 2018 publicado en la revista The Lancet Diabetes & Endocrinology encontró que la obesidad fue responsable del 37% de los casos de diabetes tipo 2 en todo el mundo.
Las causas exactas del síndrome metabólico aún no se comprenden completamente, pero se cree que una combinación de factores genéticos y ambientales juega un papel importante. Los factores de riesgo incluyen una dieta poco saludable, la inactividad física, el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol.
”También hay una estrecha relación entre este síndrome y la edad debido a que la edad está asociada a la disminución de la masa muscular y eso es un factor de riesgo”, aclara el Dr. Guixé.
Es importante que las personas comprendan la relación entre el síndrome metabólico y la salud del corazón. Según la American Heart Association, las personas con síndrome metabólico tienen un riesgo tres veces mayor de sufrir un accidente cerebrovascular o una enfermedad cardíaca en comparación con aquellos que no tienen la afección.
La buena noticia es que el síndrome metabólico puede ser prevenido y tratado con cambios en el estilo de vida, incluyendo una dieta saludable y equilibrada, ejercicio regular, reducción del estrés y una mejor gestión del peso. También hay medicamentos disponibles que pueden ayudar a tratar el síndrome metabólico, pero deben ser recetados por un médico.
“El Tratamiento del SM se basa en 3 pilares: Modificaciones en estilo de vida (detener tabaquismo, y consumo alcohol moderado, por ejemplo), dietoterapia (baja ingesta de grasas saturadas, grasas trans y colesterol, reducción de azúcares simples, y aumento de frutas, vegetales y granos enteros) y actividad física”, afirma el especialista.
Ahora bien, como uno de los factores importantes es la obesidad, la cirugía bariátrica es una opción de tratamiento para la obesidad y el sobrepeso, y puede ser especialmente efectiva para pacientes con síndrome metabólico.
“La cirugía bariátrica es el tratamiento más efectivo para la resolución de la obesidad y las patologías secundarias a esta patología, como la diabetes y la hipertensión. Las patologías metabólicas asociadas a la obesidad se curan con la esta cirugía y, lo más importante, es que esta curación se mantiene con el tiempo, a largo plazo”, concluye el Dr. Guixé.
Varios estudios han demostrado el efecto de este tipo de operación. Entre la evidencia que permitió confirmar la efectividad de la cirugía bariátrica en el control de la diabetes tipo 2 se cuenta un estudio que siguió por cinco años a pacientes obesos que tenían esta enfermedad no controlada y que fueron sometidos a la intervención.
Se trata del estudio Stampede (Surgical Therapy And Medications Potentially Eradicate Diabetes Efficiently), realizado por Cleveland Clinic, que comprobó que el procedimiento quirúrgico fue capaz de mejorar continuamente el control glicémico y reducir las necesidades de medicación a largo plazo.
Un estudio publicado en la revista Diabetes Care señaló que la cirugía bariátrica resultó en una mejoría significativa de la glucemia, la presión arterial y los niveles de lípidos en pacientes con síndrome metabólico. Otro estudio publicado en la revista Obesity Surgery encontró que la cirugía bariátrica también resultó en una mejora significativa de la resistencia a la insulina en pacientes con síndrome metabólico.
Es importante destacar que la cirugía bariátrica no es una cura para el síndrome metabólico, pero puede ser una herramienta efectiva para controlar los factores de riesgo asociados a la enfermedad.
