Muchas universidades venden sus magíster como los mejores y más útiles para crecer profesionalmente, pero quizás no haya ninguno que acerque tan mágicamente a sus pupilos a la elite, el éxito y el olor del poder, convocando a lo más granado e influyente de los «rostros» relacionados con la comunicación, la política y los negocios. Tome nota.
Con tarjeta de crédito Corpbanca, el Master en Comunicación Estratégica de la Universidad Adolfo Ibáñez se puede pagar hasta en 36 cuotas sin interés. Son sólo 350 UF (7 millones 350 mil aprox.), que después de cursar el posgrado se pueden recuperar mucho antes de que venza la última cuota. Basta hacer una rápida pasada por los nombres que integran el equipo docente, para darse cuenta de que el egresado tiene activada desde el primer día una red de contactos inmejorable, que si no se refleja en una mejora de sueldo y trabajo al menos garantiza el acceso a los detalles más sabrosos de la información que emana desde los pasillos del poder, o por último una entretenida conversación de alto nivel.
Con Dios y el Diablo
«Queremos que los alumnos cultiven una estrecha relación con los profesores, para ellos también es muy importante generar retroalimentación con los alumnos», dice Agustín Olavarría, director de admisión. Si no contesta el teléfono Eugenio Tironi, o el alumno estima que sus bonos ya no están tan altos como a principios de los 90′, entonces se puede marcar el número de Claudio Rutlant, el segundo hombre de Imaginacción, la única empresa de comunicación estratégica que admite honestamente hacer lobby, dirigida por Enrique Correa, quien como nunca antes está alejado del candidato oficialista, pero que igual se mantiene incombustible.
O bien si hay algún asunto que resolver con Barrick, Agrosuper o Colbún a un toque de blackberry estarán las hermanas Pilar y Marilú Velasco, socias fundadoras de Extend, otra de las empresas top en comunicación estratégica, ambas hijas de Belisario Velasco, otro omnipresente en algunos círculos, aunque ya no sea ministro. Puede que algo de lo que ocurre en La Moneda se filtre a través de Cristina Bitar, sobrina del ministro de Obras Públicas, ex socia de Hill & Knowlton y cercana también a figuras de la Alianza como Joaquín Lavín y Pablo Zalaquett
En caso de que el inscrito tenga intereses políticos pero a veces se sienta agotado por las pequeñeces de la coyuntura, puede encontrar alternativas más elevadas en el filósofo y sociólogo Max Colodro, profesor y columnista recurrente de El Mercurio.
Ahora, si tanta amistad con figuras asociadas a la Concertación parece una mala estrategia con un posible gobierno de derecha a la vista, entonces el café del intermedio puede ser con Leonidas Montes, decano de Gobierno de la UAI, quien no se anda con chicas y es doctor en Economía y licenciado en Filosofía. Pero si la conversación se vuelve muy etérea entonces el almuerzo resultará más pragmático con Roberto Méndez, director de la empresa de estudios de opinión y encuestas Adimark, y uno de los hombres históricamente más cercanos a Sebastián Piñera.
Ejecutivos sensibles
Por último si los alumnos están con los temas un poco añejos para comentar en el asado será prudente quedarse a escuchar el análisis de Fernando Paulsen, periodista de Chilevisión, miembro del panel de Tolerancia Cero, quien actualizó hace un año sus conocimientos durante una publicitada estadía en Harvard.
Eso sí, todos estos acercamientos podrán ser en alguno de los ratos libres porque el magíster ofrece «una valiosa oportunidad de estudiar comunicación estratégica» en tiempos que las empresas necesitan cuidar sus marcas, manejar las crisis y especialmente las relaciones con la comunidad cada vez más activa.
«Hasta ahora, las empresas externalizaban sus asuntos de comunicación estratégica y los llamaban en momentos de crisis terminal como cuando uno llama al SAMU para que le hagan resucitación, o se relacionaban con la comunidad sólo a través de acciones de beneficencia Muchas compañías quieren tener dentro de sus directorios o como ejecutivos a gente preparada que maneje las complejidades de la comunicación como un trabajo mucho más completo y a largo plazo, no sólo para salir de una crisis.» dice Agustín Olavarria.
Por eso entre los matriculados hay ejecutivos de empresas e instituciones cuya imagen y marca son especialmente delicadas o vulnerables a las críticas y embates de la comunidad. Entre los 22 inscritos (son 25 cupos) hay gente de empresas mineras, del Ministerio Público, del Banco Central y Lan Chile entre otros representantes de consultoras y profesionales independientes.
El curso que dura un año, nació en las cabezas de los académicos de la Escuela de Negocios, pero el expertise en comunicación lo puso el decano de Periodismo, Ascanio Cavallo, socio de Tironi y top one entre los analista políticos dominicales. Cavallo convocó a varios de los «rostros» que hacen clases en el programa y que finalmente es un trabajo conjunto entre las escuelas de Negocios y Periodismo. Si se matricula antes del 5 de marzo tiene un 5 por ciento de descuento. ¡Todavía quedan vacantes!
