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«Calladita no eres más bonita», relatos sobre las primeras violencias en una relación BRAGA Créditos: Editorial Meraki / Efe

«Calladita no eres más bonita», relatos sobre las primeras violencias en una relación

La obra interpela y tiene un «carácter vocacional», pues lo que busca es que las personas que la lean utilicen «el lenguaje como herramienta de denuncia». «Pero no denuncia como un altavoz social, sino para comunicar a otros si te encuentras mal o si necesitas pedir ayuda para salir de esa relación que no es sana, para no mantenerse en silencio y que así las cosas vayan cambiando poco a poco», afirma la autora, Nuria Prieto.


Presiones, celos, hostigamiento y chantajes son algunas de las primeras violencias machistas que se cometen en las relaciones y que, disfrazadas de supuesto amor, son difíciles de identificar. En esas alarmas es donde la arquitecta Nuria Prieto ha querido poner el foco con «Calladita no eres más bonita» (Meraki, 2021), un título en el que 10 jóvenes cuentan las agresiones que sufrieron por parte de sus parejas o amistades.

«La justificación de determinados comportamientos tiene que ver mucho con una raíz social. Es decir, la sociedad en sí misma muchas veces oculta, muchas veces no da valor a determinadas alarmas que si alguien no te ha explicado que es una alarma no la vas a reconocer», afirma la autora e ilustradora del libro en una entrevista con Efeminista.

La obra, asegura Prieto (Ponferrada, 1985), interpela y tiene un «carácter vocacional», pues lo que busca es que las personas que la lean utilicen «el lenguaje como herramienta de denuncia». «Pero no denuncia como un altavoz social, sino para comunicar a otros si te encuentras mal o si necesitas pedir ayuda para salir de esa relación que no es sana, para no mantenerse en silencio y que así las cosas vayan cambiando poco a poco», afirma.

Relatos sobre primeras violencias

Para estos relatos, la autora ha utilizado un tono especial: se cuenta la realidad de la protagonista mediante perspectivas paralelas o metáforas. «La literatura me ha permitido ocultar de alguna manera la identidad de las chicas. Hay determinados personajes que aparecen alrededor de ellas que sí que son ficcionados para dar una mirada diferente, que muchas veces son miradas que se encuentran en nuestra sociedad».

«Es una lectura más sencilla pero no elimina la tensión, angustia o las partes de miedo y de violencia que existen en la narrativa real», agrega.

Para transmitir esas sensaciones le pidió a las protagonistas que durante las entrevistas hicieran hincapié en cómo se sintieron al vivir esos momentos de violencia.

«Hoy, mientras paseaba con Cary, he visto a Lucía. Me ha parecido bien raro verla por aquí, ya que debería estar en el instituto preparándose para entrar en la carrera que quiere estudiar… Mucho me temo que algo tiene que ver con el novio ese, quien, por cierto, iba con ella. Le he preguntado qué tal estaba, y el chico apenas la ha dejado contestar; parecía realmente preocupada». Extracto de ‘Calladita no eres más bonita’.

Después de cada relato se incluye una breve reseña de la historia que se esconde tras la narrativa, además de una biografía (algunas veces anónima) de la protagonista. También hay consejos o conclusiones que las jóvenes aportan.

«En todas las entrevistas las chicas me dijeron una frase que me llamó la atención: «Yo te cuento mi historia porque no quiero que a ninguna chica más le vuelva a pasar». El hecho de someterse a un momento de tensión y difícil para ellas, tener que volver a recordar todo para contármelo a mí es un gesto de generosidad enorme», recuerda.

«Calladita no eres más bonita»

La elección del título del libro también está cargado de intención. «Con mi editora queríamos encontrar una expresión que siempre se nos haya atribuido a las mujeres».

«Cualquiera que la escucha hoy en día le va a resultar anacrónica por completo. Sin embargo, de una manera subliminal sigue estando presente. Todavía se ve mal que una mujer hable de determinados temas, que grite o tenga determinados comportamientos que a un hombre sí se le admitirían. Y enseguida aparecen los típicos insultos de histeria y de un montón de cosas que se asocian en el momento en el que una mujer alza la voz más de lo habitual», señala.

Además, la autora cree que este significado encaja perfectamente con la valentía que han tenido estas jóvenes al contar sus historias.

“Como yo estaba anulada y en estado de shock después de todo aquello, él se aprovechó de mí y me preguntó si quería que volviésemos a intentarlo y yo asentí. Y aunque él me pidió un tiempo para recuperarse, empezó de nuevo la tortura, pero ahora mucho peor. Llamadas continuas, presiones…”. Extracto de ‘Calladita no eres más bonita’.

Parte de los relatos también pueden leerse y escucharse de la voz de las protagonistas en una cuenta de Instagram que han creado para difundirlos.

Hablar sobre las violencias

Prieto ya está preparando una segunda parte de este libro en el que incluirá historias de mujeres con discapacidad, racializadas, de abogadas de violencia de género que han sufrido agresiones y de violencia machista en el ámbito laboral o en el de la salud.

Precisamente una de estas jóvenes acompañó a la autora a un instituto para presentar el libro y la respuesta de los alumnos les sorprendió. «Después de que ella contó su historia, una adolescente vino a hacernos preguntas sobre qué era una relación de dependencia, qué pasa si te revisan mucho el móvil, cosas que habíamos comentado, pero sobre las que ella seguía teniendo dudas».

Como esa estudiante, otros y otras 40 le escribieron por redes sociales a la protagonista de la historia del futuro libro de Prieto y días después les avisaron del instituto que habían detectado un caso de violencia de género.

«Para mí eso ya fue suficiente y pensé que el libro había valido la pena», zanja.

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