Acompañados por el músico Nano Stern, dos europeos del este recorren diversas ciudades de Sudamérica presentando un espectáculo que rescata elementos clásicos del teatro y los conjuga con una infinidad de elementos de otras culturas. En Chile tienen programadas sólo tres fechas.
Un esloveno, una checa y un chileno conjugan el teatro, la música y los títeres en un espectáculo que se presenta en tres actos. Provenientes de la Escuela de Teatro Alternativo en Praga, Matija Solce y Anna Duchanova conocieron al músico local Fernando -Nano- Stern, con quien engancharon rápidamente, formando el Trío Lalucek.
Mezclando elementos del teatro tradicional junto a otros de teatro objetual y sistemas especiales de títeres creados por ellos mismos, la tripleta ofrecerá tres presentaciones para diferentes tipos de público los primeros días de marzo, en el marco de una gira que los tendrá viajando por diversas ciudades de Latinoamérica.
El show promete ser de lo más ecléctico, algo bastante probable debido a la experiencia que Matija, Anna y Nano han recolectado a través de sus participaciones en diversos festivales musicales y encuentros musicales por todo el mundo. Es así como incorporan con facilidad ritmos tradicionales con elementos de la sonoridad balcánica, latinoamericana, rusa, africana, irlanda y napolitana, dándoles una reinterpretación y generando un sonido propio.
Según explica Matija Solce, la música del trío es, a veces, muy rítmica y precisa, sin cambios. Otras, es una interpretación libre. "Si escuchamos que el público se conecta con nosotros, improvisamos más". Él, a cargo del acordeón y el canto; Anna Duchanova en el saxo, violín y canto, y Fernando Stern con guitarra, violín y voces.
Otra particularidad del montaje es la presencia de muñecos y títeres de diversas formas y modos de interpretación. "Son mis propias invenciones, algunas son muy simples y otras son muy expresivas, que se pueden comunicar más con el público, improvisar y conectar la música con la escritura y el teatro", dice Solce, asegurando que esta cualidad permite que los shows "se puedan ver en Chile, Japón, Rusia y la gente los entiende".
Según cuenta, primero comenzó haciendo los tradicionales títeres de mano, llegando posteriormente a idear sistemas que le permitieran crear muchas expresiones. "No son sólo marionetas típicas. Tienen más expresión y carácter que el que un actor puede tener. Muchas veces pueden crear más sentimientos y ser más concretos que un actor", dice.
Aunque el espectáculo es escenográficamente minimalista, los títeres están diseñados con infinidad de detalles y a partir de materiales de reciclaje, inclusive huesos. "Todos los materiales son cosas próximas y cotidianas, que la gente ve cómo se pueden transformar y cobrar vida en distintas formas. Eso es más interesante que hacer copias de personas, incita más a la imaginación", dice Solce.
Tres actos
Los próximos 12, 13 y 16 de marzo, en la Sala SCD, Anfiteatro Museo Bellas Artes y el Bar Thelonious respectivamente, el Trío Lalucek presentará su espectáculo en tres actos.
"Pulcinella" se basa en el personaje de teatro napolitano del mismo nombre, quien no conoce miedos ni autoridades. Pulcinella nunca pierde. El texto es recreado a partir de títeres minimalistas, creados a partir de pañuelos que se van animando y cobran vida a medida que el protagonista encuentra personajes con quienes interactuar. Esta comedia de situaciones es apta para todo público, a partir de cinco años. 
"Little Night Tales" es, según Matija Solce, "la historia de un escritor que no puede escribir. Se va a dormir y sus historias cobran vida en la noche". En esta historia apta para todo espectador, los títeres se mueven a través de distintos y creativos mecanismos de animación y movimiento creados y diseñados por el mismo autor.
Por último, "Nariz", obra escrita por el ruso Gogol y adaptada por el trío en un espectáculo que combina el teatro del absurdo con técnicas de títeres minimalistas y grotescas. Cuenta la historia de un mayor que un día se despierta y descubre que ha perdido su nariz.
La intensa atmósfera más la música en vivo logran desplazar al texto de su rol central. "Esta historia es muy interesante. El tipo se encuentra con su nariz, y esta tiene una posición más alta en jerarquía que la de él. Entonces no sabe cómo hablarle. Le dice: perdona, eres mi nariz. Y la nariz dice que no lo conoce", ríe Solce.
