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Placeres Capitales: “Del Gigi”, desastrosas presentaciones y desconsiderado trato La crítica gastronómica del chef Gonzalo Peñafiel

Placeres Capitales: “Del Gigi”, desastrosas presentaciones y desconsiderado trato

En Del Gigi el personal debiese mejorar el trato con los clientes y cambiar el discurso que al que no le gusta se va. La idea es pasar un momento agradable, ya que la vista está. La cocina, por su parte, tiene que tener los productos ofrecidos y mejorar la manipulación de éstos.


Del Gigi lleva el apodo de su extrovertido dueño Francisco David, cocinero autodidacta, ex participante y primer eliminado del programa Top Chef. El restaurante queda colgando del cerro en la caleta Higuerillas, con una ubicación privilegiada a metros del mar. Es una de las terrazas con la vista más hermosa del sector y tiene un rústico ambiente tipo informal.

El personal es ágil y joven. Gigi (61), quién cocina y además atiende en las mesas, parece uno más. Todos comparten un mismo estilo: visten y atienden con la mejor de las ondas, pero, al primer disgusto, sacan un fuerte carácter que lo hacen notar. Tienen respuestas excesivamente fuera de contexto para lidiar con un cliente, estando a la defensiva en toda la conversación.

Cuesta creer que un restaurante, ubicado en una caleta, no tenga más de la mitad de los mariscos de la carta un día domingo. Aunque quisimos irnos, ya estábamos instalados y decidimos darle una oportunidad.

Chupe

¿Qué probamos? Ceviche Mixto ($10.950) que, sin probar, ya se sentía un rechazo por el pincho con cebolla cruda y pomelo en su tope como decoración, además de las frutas al borde del plato, grotescas y sin sentido. Esto último, una particular manera de aumentar los costos de un plato y una evidente falta de buen gusto en el montaje, algo nunca antes visto. El ceviche, por su parte, era puro sabor a limón, con aspecto y sabor de haber estado marinado desde el comienzo del servicio. Al Chupe especial ($10.950) costaba encontrarle los mariscos ofrecidos y era una mezcla sumamente espesa, consecuencia del exceso de pan, producto carente de sabor. El Jardín Marino del Gigi ($11.950), era lo mejor expuesto en el almuerzo, por la poca manipulación de los elementos.

En Del Gigi el personal debiese mejorar el trato con los clientes y cambiar el discurso que al que no le gusta se va. La idea es pasar un momento agradable, ya que la vista está. La cocina, por su parte, tiene que tener los productos ofrecidos y mejorar la manipulación de éstos.

Restaurante “Del Gigi”,

Av. Borgoño 21380, Concón, Valparaíso.

Servicio: Malo

Comida: Malo

Ambiente: Bueno

Precio: De los $ 18.000 a $ 20.000 p/p

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