El misterioso agujero de 36,5 metros de diámetro que se generó a fines de julio ha provocado la movilización de las autoridades locales y llevó al regulador minero Sernageomin a suspender las operaciones de una mina del distrito Candelaria.
El Gobierno buscará aplicar duras sanciones a los responsables de un enorme socavón que se produjo cerca de una mina de cobre de la canadiense Lundin en el norte del país, dijo el lunes la ministra de Minería, Marcela Hernando.
El misterioso agujero de 36,5 metros de diámetro que se generó a fines de julio ha provocado la movilización de las autoridades locales y llevó al regulador minero Sernageomin a suspender las operaciones de una mina del distrito Candelaria.
«A pesar de que Sernageomin había hecho una fiscalización en julio, no fue capaz de detectar esta sobreexplotación y, por lo tanto, eso también nos hace pensar que tenemos que reformular cuáles son nuestros procesos de fiscalización», dijo la ministra, citada en un comunicado.
Hasta el momento, las autoridades no han entregado detalles de la investigación que se realiza sobre las causas del fenómeno.
«Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias para sancionar, no solamente multar porque a veces el Estado tiene muy pocas herramientas y las multas son insignificantes, pero no solo las multas, sino las consecuencias serias que puede traer esto para la minera tienen que ser ejemplarizadoras», agregó.
La minera dijo en un comunicado que la sobreexplotación a la que se refirió la ministra había sido informada en su oportunidad al regulador.
«Queremos ser enfáticos en que, tal como ha informado el Sernageomin, esta hipótesis no ha sido determinada, a la fecha, como la causa directa del socavón. Los estudios hidrogeológicos y mineros entregarán las respuestas que hoy buscamos», señaló la empresa.
«Se están investigando los distintos hechos que pudieron haber causado el socavón, entre los que cobra relevancia las precipitaciones anormales registradas durante el mes de julio», agregó la unidad de Lundin.
Medios locales y extranjeros han mostrado diversas imágenes aéreas del enorme agujero en un terreno cercano a la operación de Lundin Mining, a unos 665 kilómetros al norte de la capital chilena.
La canadiense posee un 80% de la propiedad, mientras que el 20% restante está en manos de las japonesas Sumitomo Metal Mining y Sumitomo Corporation.