La caída en desgracia del Grupo Penta a raíz de la investigación por financiamiento ilegal de la política no sólo dejará a Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín sin las joyas de su “corona”, sino que su venta también implicará un cambio en el escenario de la industria de seguros y administración de activos.
Mediante un hecho esencial enviado a la Superintendencia de Valores, Penta Security informó ayer que “con esta fecha, los controladores de Penta-Security, Empresas Penta S.A. titular de 7.652.383 acciones (70,01%) e Inversione Seguros Security Limitada, titular de 3.230.585 acciones (29,55%) han informado al directorio que con fecha 12 de julio de 2015 suscribieron un contrato denominado Stock Purchase Agreement (Spa) -acuerdo de compraventa de acciones- con la sociedad Liberty International Holdings Inc., con el objeto de vender a esta última o a sus personas relacionadas la totalidad de sus acciones de Penta-Security”.
Carlos Ricci, gerente general de Liberty Chile, informó a los trabajadores mediante un correo interno que “la principal motivación de nuestra casa matriz por adquirir una segunda empresa y continuar creciendo en el mercado local, obedece a los positivos resultados que ha alcanzado el grupo. Esta decisión nos motiva a seguir trabajando en equipo y nos compromete aún más con el cumplimiento de los planes estratégicos que nos hemos fijado para este 2015”.
La compra está sujeta a la concurrencia por parte de los actuales accionistas a una OPA que Liberty -firma que tiene presencia en más de 30 países en el mundo- lanzará el 30 de diciembre de este año.
“Se hace presente que los directores de Penta-Security no se han pronunciado acerca de la conveniencia de la transacción para los accionistas, lo que ocurrirá en los términos previstos en la Ley de Mercado de Valores”, señala el hecho esencial.
¿Concentración?
La transacción implicará un pago de $9.605,57 por papel (o 2,5 veces valor libro), lo que valoriza la compañía en US$161 millones. De paso, la operación creará la mayor firma del sector, con un 19,4% de las primas directas al cierre de 2014, muy por sobre sus competidores más cercanos: RSA con un 13,5%, BCI con 11,6% y Mapfre con 11,3%.
Si bien la venta de Penta-Security se produce por motivos ajenos a la industria, lo cierto es que en el sector se ha visto una serie de operaciones de fusiones y adquisiciones, todas tendientes a crear grandes compañías, como la recientemente anunciada fusión entre Chubb y ACE en Europa (ambas con operaciones en Chile), y el proceso de venta de las operaciones de RSA en la región.
Así, con la compra por parte de Liberty, BCI será la única firma de seguros generales de capitales chilenos entre las cinco más grandes, esto ya que recientemente la alemana HDI adquirió Aseguradora Magallanes, la que tenía un 8% del mercado. Entre Penta-Security, Liberty y RSA, el 33% del mercado local de seguros generales será dominado por firmas extranjeras.
A la venta de la aseguradora se suma la compra de la cartera de Banco Penta por casi $590 mil millones por parte de Banco de Chile, y la venta de la banca privada, AGF y corredora de bolsa a Banco Security previo desembolso de $19.500 millones. Las transacciones implicarán que el grupo se deshaga del 39,5% de sus activos regulados (con cifras a septiembre de 2014).
Hasta ahora, Penta podría recibir US$1.055 millones por las ventas de sus activos, aunque aún resta por pagar los pasivos del bancos (depósitos y bonos), que suman US$871 millones a mayo.
Fuente: Pulso
