Publicidad
Desigualdad de remuneraciones: inversionistas se rebelan contra sueldos y bonos a ejecutivos del Reino Unido

Desigualdad de remuneraciones: inversionistas se rebelan contra sueldos y bonos a ejecutivos del Reino Unido

A solo semanas del inicio de la temporada de asambleas anuales de 2016, un número de inversores cada vez más grande está haciendo uso de su poder de votación para enviar un mensaje a las juntas de que no tolerarán fuertes aumentos salariales en medio del mediocre desempeño bursátil, los irregulares resultados financieros y el aumento de la desigualdad en las remuneraciones.


Los inversores se están rebelando contra los acuerdos de pago de varios millones de libras destinados a los máximos responsables de empresas del Reino Unido en lo que se perfila como una rebelión potencialmente más grande que la “primavera de los accionistas” de 2012, que dio lugar a la salida de algunos de los líderes empresariales más preeminentes.

A solo semanas del inicio de la temporada de asambleas anuales de 2016, un número de inversores cada vez más grande está haciendo uso de su poder de votación para enviar un mensaje a las juntas de que no tolerarán fuertes aumentos salariales en medio del mediocre desempeño bursátil, los irregulares resultados financieros y el aumento de la desigualdad en las remuneraciones. Se prevé que el conflicto alcanzará su punto álgido el próximo mes cuando la cólera de los accionistas se centre en el máximo responsable de WPP Plc, Martin Sorrell, cuyo paquete de pago para 2015 por valor de 70,4 millones de libras (US$102,06 millones) lo convierte en el líder corporativo mejor pagado del Reino Unido.

“Esto será más grande que lo ocurrido en 2012”, dijo Paul Lee, jefe de la gerencia corporativa de Aberdeen Asset Management, que administra 293.000 millones de libras (US$427.600 millones). “En los años posteriores a la crisis financiera hubo una enorme restricción en materia de pagos y ahora algunas compañías han eliminado esas restricciones”.

Hace cuatro años, una violenta reacción generalizada de los inversores por los pagos de los altos ejecutivos contribuyó a la renuncia de David Brennan, máximo responsable del gigante farmacéutico AstraZeneca, y de Andrew Moss, el líder de la compañía de seguros Aviva Group.

Cambios en el sistema

La violenta reacción en contra de aquellos que gozan de un salario contundente se extiende más allá del Reino Unido. En Francia, los accionistas de Renault SA votaron en abril en contra del pago de 7,25 millones de euros (US$8,29 millones) destinado a cubrir los honorarios de 2015 del máximo responsable Carlos Ghosn. A su vez, en Estados Unidos, las autoridades propusieron restringir los pagos de Wall Street, ante lo cual los banqueros tendrían que esperar al menos cuatro años para poder recibir sus gratificaciones en forma íntegra y las empresas podrían “recuperar parte” de esas bonificaciones más adelante en algunos casos.

Después de la primavera de los accionistas de 2012, el Gobierno implementó cambios en 2013, que dieron a los accionistas la posibilidad de realizar una votación vinculante cada tres años sobre las políticas de remuneración de las empresas, además de una votación consultiva cada año.

A pesar de los cambios, algunos inversores piensan que el sistema aún es deficiente. Los salarios de los ejecutivos se han más que triplicado en los últimos 18 años, mientras que el FTSE está operando más o menos en los mismos niveles, según un informe del 21 de abril elaborado por Nigel Wilson, máximo responsable de Legal & General, para la Asociación de Inversión del Reino Unido.

“El actual enfoque para las remuneraciones de los ejecutivos de las empresas que cotizan en el Reino Unido no cumple con su propósito”, según escribió Wilson. Ha “resultado en una mala convergencia de intereses entre los ejecutivos, los accionistas y las empresas”.

Publicidad

Tendencias