En septiembre, las ventas minoristas mostraron una caída de 4,6% frente al mismo mes de 2011, lo que implica la séptima baja consecutiva y refleja la desaceleración del consumo, fenómeno que también muestran las cifras oficiales.
Los datos, que provienen de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), muestran que el mes pasado todos los rubros que forman parte del relevamiento tuvieron ventas -medidas en unidades- inferiores a las de un año atrás.
Además del sector inmobiliario, cuyas ventas se habrían desplomado 33,6% -extendiendo las bajas que vienen registrando los colegios de escribanos-, otros sectores donde las ventas verificaron bajas importantes fueron ferretería (-5,2%), electrodomésticos y electrónicos (-5,2%), perfumería (-4,6%) y farmacias (-4,4%).
Para CAME, entidad cercana al Gobierno, las ventas se vieron afectadas “por un público más cauto y conservador en sus decisiones de gasto”. El informe de la entidad que conduce Osvaldo Cornide añadió que “el comportamiento general de las familias fue endeudarse lo menos posible y no comprar productos que no sean necesarios”.
Este diagnóstico es muy similar al que hizo, pocos días atrás, durante las jornadas de supermercados, Martha Lucía Giraldo, country manager para la Argentina y Uruguay de la consultora Nielsen. En opinión de la experta, la incertidumbre sobre el futuro de la economía hace que los consumidores argentinos cuiden el dinero que tienen en el bolsillo, por lo que se muestran menos dispuestos a consumir.
Con ella coincidió Guillermo Oliveto, presidente de Consultora W, que hizo referencia a la baja que viene mostrando el índice de confianza del consumidor que calcula el Centro de Investigación en Finanzas (CIF) de la Universidad Torcuato Di Tella. Los índices de la Fundación Mercado también muestran una tendencia a la baja (ver recuadro).
Para CAME, la caída de las ventas minoristas durante el mes pasado también se debió a que “septiembre de 2011 resultó un mes muy bueno, por lo que la base de comparación resulta significativamente alta”. Asimismo, el informe hizo referencia al aumento del comercio informal.
Más allá de esas explicaciones, el consumo privado viene mostrando una clara desaceleración, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). La última información oficial sobre cuentas nacionales indica que en el segundo trimestre de 2012 el consumo privado creció 4,2% frente al mismo período del año anterior. Esta tasa es casi tres puntos más baja que la del trimestre previo y muy inferior al 10,7% de 2011.
El informe de CAME añade que si bien la caída de septiembre fue menor que la de meses anteriores los empresarios del sector minorista “esperan que la actual tendencia se revierta recién a partir de mediados de noviembre”.
