El atleta ocho veces campeón olímpico se consagró ganador en una carrera… en el espacio.
Usain Bolt demostró sus dotes de velocista corriendo en la parte trasera de un avión sin fuerza de gravedad, como parte de una campaña de publicidad de una botella de champán diseñada especialmente para los turistas espaciales.
Esta aeronave se utiliza normalmente para realizar investigaciones científicas, pero, en este caso, fue empleada para promocionar el diseño de la botella creado por la marca Mumm.