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Fuerzas de seguridad se despliegan en Trípoli para finalizar enfrentamientos

El jefe del Frente de la Acción Islámica, Fathi Yakan, cercano a la oposición, dijo que los incidentes de Trípoli, cuyo primer brote de violencia se remonta al mes pasado, se enmarca en un »plan» supuestamente tramado por las fuerzas de la mayoría parlamentaria para »tratar de impedir que se celebren elecciones (previstas para 2009), ya que la actual mayoría se transformaría en minoría».


La Policía y el Ejército libaneses fueron desplegados este sábado en los barrios de la ciudad libanesa de Trípoli donde desde la tarde del jueves se enfrentan suníes y alauíes, para intentar poner fin a los combates que ya han causado la muerte de al menos seis personas.



Una fuente policial indicó que las fuerzas de seguridad tienen orden de responder a los disparos y comentó que habían sido detenidas varias personas armadas, aunque no precisó su número.



Los dos días de enfrentamientos, que se han concentrado en los barrios de Beb Tabane, de mayoría suní, y de Yabal Mohsen, de mayoría alauí, han causado la muerte de al menos seis personas y heridas a otras 44, según esta fuente policial, aunque medios de información locales sitúan la cifra de víctimas mortales en nueve.



Asimismo, numerosos ciudadanos han buscado refugio en varios colegios locales para protegerse de los enfrentamientos, en los que se han usado tanto armas ligeras como lanza granadas.



La pasada noche, el ministro de Interior Ziad Barudi, acompañado por el jefe de la Policía, el general Achraf Rifi, se trasladó a Trípoli para intentar calmar la situación, después de que el viernes fracasara un alto el fuego decretado por las autoridades políticas y religiosas de esta ciudad libanesa.



Mientras suníes y alauíes, los primeros progubernamentales y los segundos cercanos a la oposición, se acusan mutuamente de haber desencadenado los enfrentamientos, los responsables de la mayoría parlamentaria y de la oposición también se responsabilizan de haber provocado lo sucedido para obtener ganancias políticas.



El jefe del Frente de la Acción Islámica, Fathi Yakan, cercano a la oposición, dijo que los incidentes de Trípoli, cuyo primer brote de violencia se remonta al mes pasado, se enmarca en un «plan» supuestamente tramado por las fuerzas de la mayoría parlamentaria para «tratar de impedir que se celebren elecciones (previstas para 2009), ya que la actual mayoría se transformaría en minoría».



Por su parte, Mustafa Aluch, diputado de Corriente de Futuro -principal partido de la mayoría- declaró que «lo que sucede ahora responde a una tentativa para evitar que se cumpla la cláusula del acuerdo de Doha relativa a las armas (al desarme) de Hizbulá, que trata de encontrar una nueva legitimidad para ellas».



«Creo que Hizbulá siempre encontrará excusas y nuevos pretextos para conservar sus armas», agregó Aluch.



EFE

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