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La Crisis de la economía chilena y los errores del Neoliberalismo


En septiembre de 2000, se desarrolló la Mesa Redonda «La Reactivación de la Reactivación», en la Universidad ARCIS. Compartimos dicha Mesa con el ex Ministro Oscar Landerretche y con el Profesor Hugo Fazio.



En nuestra exposición presentamos esquemáticamente los siguientes puntos: Los errores de los economistas del gobierno y de la academia, previos a la crisis de la economía chilena y en la reactivación de la economía; las limitaciones teóricas del neoliberalismo que conducen a esos errores; crítica a la interpretación del origen de la crisis y a la interpretación sobre la economía mundial; crítica a la caracterización de la actual clase empresarial chilena; el agotamiento relativo de las bases del dinamismo de la economía chilena y la asincronía del ciclo económico de la economía chilena en relación al ciclo económico en Estados Unidos.



Este resumen, corresponde al documento que desarrolló el primer punto de nuestra exposición. Los economistas en el Chile actual tienen un gran peso en la formación de opinión pública. Una elite de economistas de la academia y de la política tienen una gran credibilidad, acrecentada por su presencia en los medios de comunicación.



En nuestro trabajo mostramos que sus estimaciones, antes del inicio de la crisis de 1998-1999, durante el desarrollo de la crisis y en la etapa de reactivación han estado equivocadas y muy alejadas de la realidad. Estos errores reiterados y que causan grandes daños sociales, pasan desapercibidos y nadie dice nada. Seleccionamos desde 1998 declaraciones y estimaciones, que fueron destacadas en la prensa, realizadas por ministros, otras autoridades públicas, economistas y por el ex presidente Frei y por el Presidente Lagos.



En el trabajo de referencia, a modo de ejemplo, señalamos que: «En Chile, el optimismo sobre la fortaleza de la economía chilena y su invulnerabilidad era tan manifiesta y generalizada como lo ilustra El Mercurio de enero de 1998. Comentando un artículo del Financial Times, lo tituló con el siguiente encabezado «Ministros; Empresarios y Analistas: Realzan Solidez de Chile Frente a Crisis Asiática», y agregan a modo de síntesis lo siguiente: «Financial Times dice que el caso chileno puede ser ejemplo al resto del mundo en esta coyuntura».



Mostramos cómo justo en los momentos en que se inicia la crisis en 1998, las declaraciones de las autoridades señalaban que Chile no estaba en crisis y que no entraría en crisis. Anunciaban un crecimiento importante para la economía chilena para 1999. La realidad demostró que se dio un crecimiento negativo y con un impacto potenciado en la ocupación y en el desempleo.



Sobre este último aspecto, destacamos las declaraciones del Presidente Lagos, cuando la realidad lo obligó a reconocer que el optimismo en relación a la creación de los 200 mil nuevos empleos en el año 2000 no se cumpliría.



Señalamos que en estudios anteriores se constataba que la economía chilena pasó de un período de fuerte crecimiento económico con fuerte creación de empleo, a un período de crecimiento económico fuerte hasta 1997, pero con una disminución de la capacidad de generar empleo. La crisis de la economía chilena se inscribe en esta tendencias. Por lo tanto, la disminución de la ocupación global continuaría aún en condiciones de reactivación.



Un aspecto es señalar los errores sistemáticos de las estimaciones. Otro, es explicar por qué se cometen estos errores. En nuestra opinión parte importante de la explicación se debe a deficiencias teóricas y metodológicas que quedan en evidencia cuando el neoliberalismo es sometido a una confrontación crítica con otras escuelas teóricas de la ciencia económica. Este tema lo desarrollamos en otro documento.



Estos estudios críticos no son considerados o tienen una mínima difusión. En ocasiones, son descalificados sin ninguna argumentación. Finalizamos el documento citando el Manifiesto de la Asociación Europea de Economistas en que se afirma: «Los economistas neoliberales que promueven la libre competencia, no la practican en el campo de las ideas».

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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