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Charlie Hebdo en el ojo del huracán islamista

Miguel Espinoza
Por : Miguel Espinoza Cientista Político; Estudiante de Magíster en Estudios Internacionales, Universidad de Chile.
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En cualquier caso –y más allá de las implicaciones– el mero ataque a la revista ya es una victoria en el imaginario islamista. El hecho de que el país galo aumente los controles contra la inmigración, «acordone» el lugar del ataque, y aumente las investigaciones para dar con el paradero y motivaciones de los terroristas, ya fue un primer golpe para Francia. Un país tildado como un objetivo para el Estado Islámico, Al Qaeda y otras organizaciones islamistas.


Nuevamente Occidente, y particularmente Francia, está siendo objeto de un ataque por radicalistas islámicos. Se trata de la sede de la revista satírica Charlie Hebdo, conocida por sus portadas y caricaturas que en no pocas ocasiones han retratado de forma burlesca a musulmanes y al Profeta Mahoma. Recordemos que en septiembre del 2012 esta misma revista había hecho una caricatura de Mahoma desnudo con una estrella en el trasero, lo que desató la indignación del mundo musulmán. En aquella ocasión, la caricatura había desatado protestas en El Líbano, donde decenas de miles de simpatizantes de Hezbollah marcharon por una ciudad del sur del país y acusaron a Francia y Estados Unidos de «difamar» al Islam.

Para los musulmanes –y especialmente para los musulmanes suníes– está prohibida la simple representación gráfica o sonora de la figura de Dios o de Mahoma. Esta prohibición, aunque no está explícitamente planteada en el Corán, se ha recogido de algunos hádices (narraciones o relatos referidos a Mahoma contados por sus compañeros) que señalan la prohibición de crear representaciones gráficas de las figuras sagradas para los musulmanes.

[cita] En cualquier caso –y más allá de las implicaciones– el mero ataque a la revista ya es una victoria en el imaginario islamista. El hecho de que el país galo aumente los controles contra la inmigración, «acordone» el lugar del ataque, y aumente las investigaciones para dar con el paradero y motivaciones de los terroristas, ya fue un primer golpe para Francia. Un país tildado como un objetivo para el Estado Islámico, Al Qaeda y otras organizaciones islamistas.[/cita]

Este mismo motivo ha sido la justificación que algunos países del mundo musulmán (como Egipto, Marruecos o los Emiratos Árabes Unidos) han encontrado para prohibir el estreno de la película Éxodo: Dioses y Reyes, que retrataba a la figura de Dios encarnado en un niño de 11 años cuando se le apareció a Moisés. Y como hemos dicho, no está permitida la representación gráfica ni de Dios ni del Profeta Mahoma.

En 2012, cuando se dio el primer caso de indignación en Oriente Medio debido a la caricatura de la revista francesa, el país galo había cerrado cerca de una veintena de embajadas y escuelas por temor a las protestas en su contra. Aun así, el ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Laurent Fabius, aseguró que en su país «la regla es la libertad de expresión».

Hasta el momento, el ataque a la sede de la revista francesa ha cobrado a 12 víctimas fatales, incluyendo al director editorial y tres caricaturistas. Un testigo del hecho aseguró que uno de los hombres armados había señalado «vengar al Profeta Mahoma» y que «Charlie Hebdo ha muerto». Esta situación se da en un contexto particularmente complejo en términos de la seguridad colectiva, donde casos de extremismo islámico ya se habían constatado hace sólo pocas semanas en la lejana Australia. Aunque no se ha podido comprobar que el autor de ese ataque estuvo realmente vinculado al Estado Islámico u otra organización jihadista, su acción en solitario ya es motivo de celebración por el extremismo islámico, y probablemente también lo será en el caso francés.

En las próximas semanas, seremos testigos de que Francia y Occidente en general aumenten los controles contra la inmigración. La duda está en la revista satírica: ¿seguirá publicando caricaturas ofensivas de Mahoma? En el caso de que lo continúe haciendo, ¿será sólo en forma digital o trabajando en una sede como lo estuvo haciendo hasta hace poco?

Si Charlie Hebdo cesa sus publicaciones, sería una doble derrota para Francia. Primero, porque el radicalista islámico que afirmó «matar» a la revista satírica, estaría en lo correcto; y segundo, porque la libertad de expresión que Laurent Fabius reconocía el 2012, puede estar seriamente afectada ante estas nuevas amenazas.

En cualquier caso –y más allá de las implicaciones– el mero ataque a la revista ya es una victoria en el imaginario islamista. El hecho de que el país galo aumente los controles contra la inmigración, «acordone» el lugar del ataque, y aumente las investigaciones para dar con el paradero y motivaciones de los terroristas, ya fue un primer golpe para Francia. Un país tildado como un objetivo para el Estado Islámico, Al Qaeda y otras organizaciones islamistas.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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