Publicidad

Presidente de RN y la UDI buscan salida amistosa al tema municipal

El presidente de Renovación Nacional, Sebastián Piñera, debió dar explicaciones a Pablo Longueira por los emplazamientos efectuado a la UDI a través de la prensa. Superado el impasse se abocaron a tratar de llegar a acuerdos en materia municipal. ¿Un tema clave para el consenso?: La Florida será para la UDI.


El hotel Terrado de Iquique fue el escenario elegido por los dirigentes de la Alianza por Chile para efectuar la tan anunciada reunión ‘privada’ que el presidente de Renovación Nacional, Sebastián Piñera, solicitó a su par de la UDI, Pablo Longueira, para solucionar a ese nivel los obstáculos que impiden el ansiado acuerdo municipal. En la oportunidad, el máximo dirigente de RN debió dar explicaciones por lo dicho respecto a que su partido comenzaría las proclamaciones de los candidatos a alcalde.



Lejos de ser una bilateral, como planteó Piñera que sería, en la cena participaron -además de los presidentes de ambas colectividades- el secretario general de RN, Renato Sepúlveda; el alcalde de Vitacura, Raúl Torrealba; y la diputada Carmen Ibáñez. Por la UDI, en tanto, lo hicieron su secretario general, diputado Patricio Melero; el alcalde de Recoleta, Gonzalo Cornejo; y el diputado Cristián Leay.



En opinión de algunos de los comensales la cena fue cordial y fruto de ella la relación entre ambos partidos "sigue mejor", pues el presidente de RN precisó que el anuncio en torno a que su colectividad comenzaría a proclamar a sus candidatos, con o sin acuerdo con sus aliados, no implicaba aquellas comunas sobre las que aún no hay consenso, sino por el contrario se refería sólo a aquellas en que el partido ya tiene alcaldes.



Así se mantenía uno de los criterios básicos de la negociación. Que cada partido conservara para sí aquellos municipios en los que ya tiene alcalde de sus filas.



Aclaración que permite inferir que la advertencia que Piñera hizo a Longueira, a través de la prensa, no consiguió intimidar al timonel gremialista, que siempre ha dicho que no acepta emplazamientos públicos. Por otra parte, el líder de la UDI no le dio el gusto a su par de RN de efectuar una bilateral para ‘solucionar’ los problemas generados en la confección conjunta de la planilla municipal.



Lo que no es nada nuevo es que las bravatas de Piñera no surtieron efecto alguno entre sus socios, por el contrario una vez más fue Renovación Nacional -en la figura de su presidente- la que debió echar pié atrás y dar explicaciones a la UDI para descomprimir las relaciones y avanzar en la búsqueda de un acuerdo.



Sin embargo, la cena resultó ser bastante prometedora porque aunque no se logró cerrar un acuerdo total y completo, se avanzó un importante trecho en los aspectos más conflictivos de las negociaciones.



Por supuesto, los alcaldes ‘trásfugas’ fueron el plato de fondo de la comida. La situación de las ocho comunas en que sus alcaldes, siendo elegidos por RN, se cambiaron a la UDI -Rancagua, Codegua, Empedrado, Puyehue, Coyhaique, Aysén, Cochrane y Puerto Cisnes fue ampliamente analizada. En este plano Longueira habría reiterado la oferta de ceder a sus aliados ocho comunas similares a las perdidas por RN, entre las que actualmente pertenecen a la Concertación.



Esto, porque Longueira insiste en defender el derecho a repostular al cargo de todos sus alcaldes, ya sea lleven años o meses en la UDI. Mientras tanto, Piñera habría insistido en que algunos de los ediles cuestionados por su partido son más ‘trásfugas’ que otros, por la forma en que se trasladaron de tienda política. En este contexto, RN se abrió a un acuerdo en aquellas comunas en que la forma de cambiarse de partido es menos cuestionable, con lo que se abrió una importante brecha de solución al conflicto, pues RN, en esos casos particulares estaría dispuesto a ser compensado.



La Florida para la UDI



También se abordaron los ‘casos especiales’ como ha dado en llamar RN al problema que se suscita con las comunas de Santiago y La Florida. A este respecto, mientras la tienda de Piñera defiende la primera porque ‘generosamente’ la cedió al actual alcalde, Joaquín Lavín, en la pasada elección municipal; en la UDI sostienen que La Florida sólo se podrá conservar si el actual edil, Pablo Zalaquett, va a la reelección.



También juega a favor de Zalaquett que Lavín habría manifestado su deseo de que el alcalde se mantenga en el municipio. A pesar de que llegó a él en un cupo de Renovación Nacional, porque había ‘olvidado’ que ya militaba en la UDI.



Aunque no ha sido posible confirmarlo, trascendió que para estos casos habría un principio de acuerdo. ¿En qué consistiría? En que la UDI se quedaría con La Florida, compensando a sus socios por la pérdida, pero que en el caso llegar a un acuerdo total en la plantilla, Santiago podría volver a la tienda de Piñera.



Este acuerdo estaría condicionado a que antes se logre un consenso general en torno a la plantilla conjunta, de no ser así todo queda en cero y vuelta a empezar.

Publicidad

Tendencias