Integrantes de ambas listas estiman que las negociaciones para levantar una mesa de consenso ya están cerradas, por lo que serán los consejeros los que deberán definir la situación. Ello, sin embargo, no será obstáculo para que quienes aún se niegan a admitir la posibilidad de la competencia presenten un voto político en tal sentido.
Un Consejo General menos incendiario de lo que se auguraba tendrá hoy Renovación Nacional. Todo indica que la resolución del Tribunal Supremo, de atrasar la fecha, a pesar que los autoconvocados habían fijado el encuentro para el 23 de marzo, cumplió con el objetivo buscado de enfriar los ánimos para evitar un duro enfrentamiento interno. Lo que no significa que el ambiente esté tranquilo, ya que ambas listas que compiten por la presidencia de la colectividad se preparan para hacer campaña entre los consejeros.
La ‘temperatura’ del partido se habría distensionado debido a la postergación de la fecha del consejo autoconvocado; pero también gracias a los encuentros entre Sebastián Piñera y Andrés Allamand y al acuerdo municipal a que se está llegando con la UDI, que a juicio de las cúpulas del partido es muy favorable para RN. Tanto es así, que los representantes de ambas listas del partido, Sergio Diez y Baldo Prokurica, también suscribieron los mecanismos a través de los cuales se nominarán los candidatos a alcaldes.
Aunque desde el martes 23 -fecha en que se cerró el plazo para la inscripción de las listas- se iniciaron las negociaciones, y también las presiones, para lograr que el ex senador Sergio Diez o algún integrante de su lista se bajara, nada de eso ocurrió.Lejos de lo esperado, el ex parlamentario, seguro de su triunfo y de que su opción es la más representativa del partido, cerró cualquier posibilidad de llegar a una mesa de «consenso» antes de la competencia. Aún cuando no descarta la integración posterior.
Sin embargo, a pesar que los más optimistas todavía apuestan a esa posibilidad, lo cierto es que tampoco está tan claro que tras la elección, el 17 de abril, exista ánimo para integrar a la lista «A» un par de representantes de la «B», siempre en el entendido que la primera gane.
En la alternativa del senador Baldo Prokurica, en tanto, aseguran que se están preparando con todo para competir, porque estiman que agotaron las instancias para lograr que, en «un gesto de unidad», se pudiera acordar una lista de consenso, a lo que el ex senador Diez se ha negado de plano, esgrimiendo que comenzado el proceso electoral se debe concluir, porque eso permite que las bases del partido se expresen democráticamente.
Asimismo, Diez ha insistido en que no hay que dramatizar en torno a una elección interna y que el proceso no tiene por qué implicar el quiebre de Renovación Nacional, como postulan quienes persisten en la necesidad de alcanzar un consenso antes de las votaciones del 17 de abril. Por su parte, estos últimos explican que la situación que atraviesa la colectividad no se presta para un proceso que podría polarizar aún más a la colectividad.
Mientras todos dan por cerradas las negociaciones y se disponen a mostrarle a los consejeros que son la mejor oferta, hay representantes de distintas regiones que ya preparan sus respectivos votos políticos para presentarlos en la reunión. Por lo menos, se sabe que la Octava, Cuarta y Región Metropolitana trabajaban, hasta ayer, en la redacción de los respectivos documentos. Aunque se desconoce su contenido, ha trascendido que hay para todos los gustos, desde incendiarios hasta moderados, pasando por uno unitario.
Pero, además, trascendió que también existe uno que interpreta al grupo que sigue apostando por una directiva de consenso, el que de llegar a ser votado, auguran algunos, corre el riesgo de sufrir una aplastante negativa de parte del consejo.
Gobernabilidad ¿sí o no?
En medio de este escenario, lo que podría generar un ambiente confrontacional es el hecho de que algunos adherentes a la lista de Prokurica hayan planteado que la lista adversaria, de ganar, no estaría en condiciones de dar gobernabilidad interna, porque no contará con el apoyo de todos los parlamentarios.
En base a esta posición se especula que pudiera presentarse un voto político más drástico que obligue a los perdedores a asumir su derrota dentro de una democracia interna, aceptando que deberán sumarse al trabajo partidario y responder a las directrices de la nueva mesa. Previendo que la lista «B», en caso de perder, pudiera salirse de la línea de la colectividad y provocar episodios como los sufridos por Piñera, un integrante de la lista «A» advierte que en dicho caso funcionará el Tribunal Supremo sin contemplaciones.
Por otra parte, asegura que la lista más representativa es la encabezada por Diez y que en ello radica el que sus adversarios hayan hecho todos los esfuerzos por llegar a una lista de consenso. Está convencido que el día de las elecciones el triunfo será categórico, osando incluso pronosticar un 70 contra un 30 por ciento.
El tema de la gobernabilidad no es menor en RN, ya que este fue el principal escollo que tuvo Piñera, al verse permanentemente enfrentado a los disidentes que siempre encontraron algún elemento para no alinearse a las decisiones de la directiva.
Ambiente electoral
Si bien el ambiente en que se dará el Consejo General no será todo lo incendiario que podría haber sido si se hubiera realizado el 23 de marzo, por la cercanía de la renuncia del ex presidente de la colectividad, Sebastián Piñera, sí estará cargado una atmósfera de campaña. De hecho, según ha trascendido, los equipos de campaña preparan su batería electoral. Dípticos, ‘chapitas’ y otros elementos «sorpresa» recibirán a los consejeros a medida que comiencen a arribar a la sede del ex Congreso.
En estas circunstancias, el encuentro se convertirá prácticamente en el lanzamiento oficial del período de campaña, durante el cual representantes de ambas listas intentarán convencer a los consejeros de ser la mejor opción. De este modo, si en el debate el ex diputado Andrés Allamand insiste en su llamado a favor del consenso, pasará a ser una voz en el desierto.
De hecho, al menos según el programa, Allamand no está considerado entre los discursos que se darán hoy. El Consejo General será abierto por el presidente interino, Renato Sepúlveda; posteriormente, el ex presidente, Sebastián Piñera, dará una cuenta de su gestión y un discurso de despedida. Tras estos discursos, alrededor de las 11:00 de la mañana se iniciará el debate. Allí será donde Allamand tendrá un espacio para opinar, al igual que los demás consejeros.
Pasadas las 16:00 horas Sepúlveda volverá a tomar la palabra para entregar un informe completo sobre el acuerdo municipal marco suscrito ayer. Terminado este informe, tomarán la palabra los candidatos a presidir Renovación Nacional y, por último, se expondrán los votos políticos.
Pese a ello, todo indica que nada cambiará el escenario que había hasta anoche y es una mayoría la que cree que no será posible impedir la competencia total en el partido, aunque los consejeros tendrán definitivamente la última palabra.
