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FFAA bolivianas denuncian «Plan Alpaca» para invasión ‘pacífica’ chilena

Consejo Supremo de Defensa Nacional (Cosdena), entidad que analiza las probables amenazas geopolíticas, y que agrupa a los miembros de las Fuerzas Armadas de Bolivia, entregó al Presidente Rodríguez el detalle del supuesto plan chileno en un documento secreto, el pasado 4 de agosto, a través del entonces secretario General Permanente de Cosdena, el vicealmirante Gustavo Zalles.


El Plan Alpaca data de la década del ’70, sin embargo, el fantasma de la infiltración de efectivos chilenos y el entrenamiento de bolivianos pro-chilenos vuelve a surgir, esta vez, a través de un documento que habría redactado el Consejo Supremo de Defensa Nacional (Cosdena), entidad quer agrupa, entre otros, a los miembros de las Fuerzas Armadas bolivianas.



El Cosdena, entidad que analiza las probables amenazas geopolíticas, habría entregado al Presidente de Bolivia, Eduardo Rodríguez Veltzé, el detalle del supuesto plan chileno en un documento secreto, el pasado 4 de agosto, a través del entonces secretario General Permanente de Cosdena, el vicealmirante Gustavo Zalles, según consigna el periódico más antiguo de dicha nación, El Diario, de La Paz.



Peligros de acuerdo vigente



El Consejo Supremo alerta sobre los peligros del acuerdo migratorio, comercial y militar recién suscrito con Chile, que a juicio de las FFAA bolivianas »contradice la decisión de recuperar un puerto marítimo sobre el Pacífico y, por el contrario, favorece la política de expansión de Chile, consistente en la invasión pacífica del territorio nacional», destaca la publicación.



El acuerdo migratorio contempla que bolivianos y chilenos podrán circular libremente entre ambas fronteras, con el sólo uso de la cédula de identidad, lo que a juicio del Cosdena se está »promoviendo una invasión pacífica de Chile a Bolivia, que viene realizando en base a un plan estratégico conocido con el nombre de Plan Alpaca".



Al mismo tiempo, la entidad de defensa y seguridad también alerta sobre el »desminado» de la frontera entre Chile y Bolivia. Ya que a su juicio Chile reconoce sólo la existencia de algo menos de 23.000 minas, »mientras que las autoridades bolivianas afirman que existen cerca de 197.000 en diferentes campos de la región fronteriza. La diferencia abismal entre las cifras parece indicar que Chile pudiera no tener la intensión de extraer la totalidad de las minas colocadas. En tal sentido, cabe desarrollar algunas hipótesis que expliquen la actitud del gobierno chileno: 1) El gobierno de Chile puede no haber sido informado conscientemente por el Ejército de dicho país, acerca del número exacto de minas activadas; 2) El Ejército de Chile y su gobierno conocen que la cifra real de minas activadas es superior, pero se abstienen de revelar dicha información».



Cosdena destaca además la »ingenuidad» con la cual militares y autoridades del país del altiplano se prestan »al juego estratégico de los chilenos y la falta de previsión en términos de seguridad del país», en el acto del inicio del desminado, iniciado el pasado 21 de julio.



Pinochet al baile



El resurgimiento de la peregrina hipótesis del »Plan Alpaca» obliga a retrotraerse a la agitada década de los ’70, cuando en Bolivia surge la denuncia de que el mundo privado planificaba la desintegración de dicho país por mandato de Estados Unidos, nación que habría ordenado a Chile que cumpliera el postulado de Pinochet, el »Plan Alpaca».



Pinochet en 1970 habría planteadp que la existencia de Bolivia era un error histórico, por tanto, debía desaparecer.



Actualmente, grupos ligados al neoindigenismo, y quienes proponen la llegada al poder de las etnias, una posición defendida en Bolivia por el candidato presidencial Felipe Quispe, del grupo Pachakuti, consideran que el plan sigue en ejecución, a través del Movimiento Nación Camba de Liberación (MNC-L), de la región de Santa Cruz, »una organización de la sociedad civil boliviana, que busca entre sus objetivos fundamentales, ratificar el principio a la Libre Determinación de los Pueblos, con la finalidad de dotar a la Nación Camba del poder de decisión para ejercer soberanía plena sobre su economía, su territorio y su cultura», como consigna en su página web.



Al mismo tiempo, detallan que como primer paso de la reorganización del Plan Alpaca se realizó el posicionamiento del concepto de »autonomía» para la zona oriente de Bolivia, una búsqueda que efectivamente movilizó a la población de Santa Cruz.



El tano Diodato



Uno de los aspectos que cobra ribetes hollywoodescos dentro de la maquinación que denuncia el indigenismo, en contra de Chile, sería el rol de Marco Marino Diodato, un italiano que a principios de 2004 se fugó de la clínica Bilbao, en Santa Cruz, poco antes de regresar el penal de Palmasola, donde se aprestaba a cumplir una condena de 10 años. Ligado al narcotráfico, a Diodato (experto en paracaidismo) se lo acusa de ser el encargado de entrenar al brazo armado de los pro-chilenos en la sierra boliviana.



Diodato fue detenido el 17 de junio de 1999, y fue acusado de espionaje telefónico, funcionamiento de casas de juegos de azar clandestinas, tráfico de armas, lavado de dinero, corrupción pública, uso de influencias, infiltrar instituciones del Estado y narcotráfico.



Finalmente, la justicia boliviana lo absolvió en el proceso por clonación de celulares y en el de los casinos. Sin embargo, fue sentenciado a cumplir diez años por delitos contemplados en la Ley 1.008, de los cuales constantemente se declaró inocente. Había apelado ante la Corte Suprema y supo que el fallo no lo iba a favorecer.



Ciencia ficción



Consultado el ex canciller boliviano, Javier Murillo, quien condujo las relaciones exteriores de Bolivia durante el régimen de Hugo Banzer (1997-2001), sobre la posibilidad del resurgimiento del llamado »Plan Alpaca», afirmó que »cada cierto tiempo se vuelve a escuchar en Bolivia de esta posibilidad, aunque para mí no tiene ningún asidero».



»El períodico El Diario es serio, es el más antiguo de Bolivia. Ciertamente no es primera vez que escucho de un Plan Alpaca, pero como en otras ocasiones, creo que detrás hay un ánimo de generar desconfianza, recelo. ¿Cuál es el origen? No lo sé», comentó Murillo.



El ex canciller recordó con humor que la posible existencia del citado plan se viene escuchando desde los ’70, »pero no cabe duda que éstos son otros tiempos, donde no hay espacio para acciones de este tipo».



Ante la posibilidad de que el prófugo Diodato pudiera estar tras la instrucción de los pro-chilenos en Santa Cruz, Murillo simplemente sentenció que eso demuestra que a veces en Bolivia »hay gente aficionada a la ciencia ficción».







lsolis_deovando@elmostrador.cl

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