Padres y apoderados acusan que »represión» digitada desde la dirección del establecimiento, tiene en estado preocupante a tres jóvenes de cuarto medio que participaron en las pasadas movilizaciones estudiantiles. Una se ha intentado suicidar en reiteradas oportunidades y a todas se le recomendó un psiquiatra. Es por ello que presentarán una querella contra la directora Julia Alvarado.
Padres y apoderados del emblemático Liceo 1 de Niñas Javiera Carrera anunciaron a El Mostrador.cl que presentarán una querella criminal en contra de la directora del establecimiento, Julia Alvarado, por el daño psicológico que está provocando a tres alumnas de cuarto medio que participaron de la toma del colegio en octubre -realizada en el marco del resurgimiento del movimiento secundario que exigía al gobierno acelerar una reforma educacional- y que ha determinado que sufran serias medidas de represalia.
Las tres jóvenes forman parte de un grupo de 27 que fueron expulsadas del liceo tras la ocupación del mismo, medida que finalmente no se pudo concretar debido a que la justicia acogió un recurso de protección a favor de todas ellas. En el grupo también se encuentra Francisca Vargas Weibel, nieta del secretario general de las JJCC José Weibel, detenido desaparecido en 1976.
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| Apoderado Claudio Ojeda |
"Consideramos que la situación que están viviendo las chiquillas, puede gatillar en cualquier momento, pero esperamos que no, una desgracia muy grande, y esa situación está siendo provocada por las presiones que la directora encabeza", dice Claudio Ojeda, apoderado que está apoyando la acción legal, pese a que su hija no está en el grupo de las sancionadas.
Ojeda espera que la acción judicial prospere en tribunales, pese a que comenta que están en conocimiento de que el hermano de la directora, Luis Alvarado, es ministro de la Corte de Apelaciones. "Confiamos en la justicia pese a ello", comenta este apoderado.
Al margen de la querella, plantea que están dispuestos a dialogar con la directora para que las alumnas de cuarto medio terminen su año bien psicológica y académicamente, y que a las de cursos inferiores no se les cancele la matrícula el próximo año.
Intento de suicidio
En resumen, las alumnas afectadas de cuarto medio son nueve, de las cuales seis decidieron no asistir más a clases, por el ambiente hostil, pero las tres restantes se arriesgaron a asistir a clases normalmente, luego de que el recurso de protección en su favor pusiera en el congelador la drástica medida adoptada por la dirección y el cuerpo de profesores.
Lo anterior fue para peor, según consta en los tres certificados emitidos por la psicóloga que las atendió los días 7, 15 y 16 de noviembre, documentos que tuvo a la vista El Mostrador.cl, aunque, por expresa petición de los padres, no se revelará el nombre de cada una de las alumnas afectadas por serios problemas sicológicos.
La más grave presenta "una franca sintomatología de depresión con intentos de suicidio (…) Se encuentra en un estado de profunda desesperanza y bloqueo emocional. No está en condiciones de continuar con sus estudios en estas graves condiciones", dice el reporte de la psicóloga Angélica Silva Canales.
La otra afectada "muestra inquietud y desasosiego acompañadas de vivencias de amenaza. Presenta temores difusos, inseguridad, sensación de vacío interior, melancolía y pérdida de energía". Y finalmente, la última joven "presenta irritabilidad, impaciencia, está en un estado de alerta y se siente amenazada con temores difusos, conducta inquieta y agitación mental", indican parte de los respectivos informes.
Hostigamiento docente
Las razones de este cuadro, que afecta también a las alumnas que no son de cuarto medio, tienen su origen en la "realidad represiva" que describe en un documento Patricia Rodríguez, madre y apoderada de una de las alumnas sancionadas, la cual enfatiza que la toma del colegio fue avalada por más de 1.600 votos, cuestión que hoy desconocen las autoridades de este liceo que depende de la Municipalidad de Santiago.
Algunos de los actos represivos que describe, de parte de los docentes, coludidos con la directora Julia Alvarado, hacia las alumnas, son los siguientes:
Lenguaje:
-Carmen Bravo: "Habla frente a diversos cursos barbaridades de las alumnas expulsadas".
-Marcelo Bravo: "Habla frente a diversos cursos sandeces de las expulsadas e increpa a las alumnas que defienden a sus compañeras".
-Norma Leiva: "Expone su parecer personal a favor de la expulsión frente a varios cursos"
Inglés:
-Julia Burgos: "No entrega guía de estudio a una alumna y la expulsa de la clase por no pertenecer al liceo", al igual que la profesora de Religión Marlí Gutiérrez.
Química:
-Clara Brito: "Advierte a las alumnas que fue fácil expulsar a 27 alumnas, así que el resto debe cuidarse. También recalca que ella fue una de las profesoras que pidió las sanciones".
La desproporcionada medida de expulsión, según los apoderados de las niñas que fueron amenazadas con ellas, es menos entendible aún si se considera que la actual Presidenta de la República, Michelle Bachelet, estudió en el Liceo 1 y en su época se dedicó también a tareas de activismo político y gremial.
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