Tito Beltrán regresó este jueves a la prisión de Malmö tras pasar casi un día ingresado en la sección de cardiología de un hospital de Ystad tras sufrir desvanecimiento en juicio por violación.
El tenor chileno Tito Beltrán atribuyó el colapso sufrido hace dos días durante la vista del juicio que contra él se sigue en Ystad (Suecia) por violación a una huelga de hambre que mantiene en la cárcel en protesta por el trato recibido.
Beltrán, de 42 años y afincado en Suecia desde hace dos décadas, denunció que el personal de la prisión ignoró sus quejas por la comida, ya que sufre de intolerancia a la lactosa, el pimentón y la cebolla, y por unos fuertes dolores en el abdomen.
«No podía comer lo que me dieron, pero ignoraron completamente mis reclamaciones», declaró este viernes al tabloide sueco «Expressen» el artista, quien tachó de «mentirosas» las acusaciones de que fingió el colapso.
El tenor regresó ayer a la prisión de Malmö tras pasar casi un día ingresado en la sección de cardiología de un hospital de Ystad.
Beltrán sufrió un desvanecimiento en la tercera jornada del juicio, lo que obligó a interrumpir el proceso y a trasladarlo a un hospital.
El artista está acusado de abusar sexualmente de la niñera de la actriz Maria Lundqvist durante la gira del espectáculo «Rhapsody in Rock» en el verano de 1999, aunque él niega los hechos y sólo reconoce haberle dado un masaje e intercambiado besos y caricias.
EFE
