Sus principales demandas son las mismas que llevaron a principios de julio a los secundarios a tomarse una serie de establecimientos en el país y coinciden con los planteamientos del “movimiento pingüino” del 2006: Tarifa escolar gratuita en el transporte público y fin de la municipalización. A ello agregan la reparación de los colegios dañados por el terremoto de febrero de 2010 y apoyo a la enseñanza técnico- profesional.
Su cumpleaños número 20 festejó este viernes el estudiante del Liceo Ministro Abdón Cifuentes de la comuna de La Cisterna, Francisco García, quien partió una huelga de hambre el 22 de agosto pasado.
El joven se sumó a la protesta que desde hace más de dos meses mantienen Johanna Choapa y Maura Roque, alumnas de cuarto año medio del Liceo Darío Salas que iniciaron su ayuno el pasado 20 de julio.
Los tres, junto a Karla Fernández, estudiante de 15 años del Liceo Experimental Artístico de Quinta Normal, que comenzó su ayuno el mismo día que Francisco, se trasladaron esta semana al frontis de la Universidad de Chile para darle visibilidad a su extrema medida de presión.
Sus principales demandas son las mismas que llevaron a principios de julio a los secundarios a tomarse una serie de establecimientos en el país y coinciden con los planteamientos del “movimiento pingüino” del 2006: Tarifa escolar gratuita en el transporte público y fin de la municipalización. A ello agregan la reparación de los colegios dañados por el terremoto de febrero de 2010 y apoyo a la enseñanza técnico- profesional.
Debido a lo prolongado del ayuno- de 66 días- Johanna Choapa y Maura Roque se encuentran internadas en el Hospital San Borja Arriarán. Su estado de salud es “mucho más delicado” ahora aseguró Mauricio Roque, padre de una de las menores.
El grupo no depondrá la huelga de hambre al menos hasta que se incorpore en el diálogo con el Ejecutivo sobre Educación a la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES). A pesar de que sus liceos no pertenecen a esta organización, sostienen que son los únicos que les dan las garantías de que sus aspiraciones serán defendidas.
