«Sus palabras no hacen más que ratificar y aumentar una discriminación ya existente en el sistema educacional chileno», sostuvo la directora del IDH, Lorena Fríes, mientras que el diputado democristiano Jorge Burgos dijo que dichos anuncios recuerdan los bandos de la dictadura militar (1973-1990).
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (IDH) criticó al alcalde de la comuna de Providencia, Cristián Labbé, quien cerró el año escolar en los liceos que están en huelga en su municipio y aseguró que no dará matrícula a jóvenes que provengan de otros ayuntamientos.
«Sus palabras no hacen más que ratificar y aumentar una discriminación ya existente en el sistema educacional chileno», sostuvo la directora del IDH, Lorena Fríes, mientras que el diputado democristiano Jorge Burgos dijo que dichos anuncios recuerdan los bandos de la dictadura militar (1973-1990).
Labbé, un coronel retirado del Ejército, que pertenece a la Unión Demócrata Independiente (UDI), anunció el viernes su drástica decisión de declarar «cerrados» varios liceos emblemáticos de esa comuna después de que los alumnos volvieran a ocuparlos, tras ser desalojados por la policía hace dos días.
«El fin no justifica los medios. La Municipalidad de Providencia declara cerrados los colegios, es decir, no va a intentar recuperarlos, y solamente siguen en clases los alumnos que hayan adoptado el programa ‘Salvemos el año’. Los que no se hayan inscritos perderán el año escolar sin contemplación», enfatizó.
Fríes dijo en declaraciones a los periodistas «que con esta medida Labbé produce una discriminación territorial».
Los colegios están bajo la administración de los municipios, que reciben subvenciones del gobierno central de acuerdo con las asistencias de los alumnos y con los paros estos pagos están en riesgo.
Las ocupaciones de los colegios se han realizado en el marco de la movilización que los estudiantes secundarios y universitarios llevan a cabo en demanda de una educación pública, gratuita y de calidad.
Burgos, en tanto, afirmó que los anuncios de Labbé «son realmente una manifestación de la intolerancia y recuerdan los bandos de la dictadura de Augusto Pinochet».
«Se cierra tal cosa. Se cierra el Congreso. Se cierra el colegio. Yo espero que estas resoluciones atrabiliarias y probablemente sin fundamento legal sean dejadas sin efecto», afirmó el congresista.
Movilizados desde mediados de mayo, los jóvenes solicitan al Gobierno que se congele el envío al Congreso de los proyectos de ley relativos a la educación, que se asegure la transparencia en el diálogo, que se aplace la fecha de cierre del primer semestre universitario, programada para el 7 de octubre, y que no se entreguen recursos públicos a las instituciones que lucran.
Por su parte, el ministro portavoz de Gobierno, Andrés Chadwick, destacó la autonomía del alcalde de Providencia para tomar ese tipo de decisiones y aseguró que «al gobierno no le corresponde opinar o referirse a ello».
Chadwick explicó a los periodistas que la validez de estas disposiciones «tendrá que verla la Contraloría».
En la tarde de este viernes, la policía chilena detuvo a tres personas -dos mujeres y un hombre- cuando un grupo de apoderados intentó protestar frente a la Municipalidad de Providencia contra la decisión de Cristián Labbé de cerrar el año escolar en ese ayuntamiento.
Según Radio Cooperativa, cuando unas 30 personas reclamaban con pancartas por la decisión del edil fueron conminadas por la policía a retirarse del lugar registrándose algunos incidentes. Las protestas se repitieron hasta entrada la noche.
Los estudiantes del denominado «Cordón Providencia» anunciaron para el próximo lunes una marcha en rechazo a la decisión del jefe comunal, que partirá a las 09.00 horas en Plaza Italia con destino a esa municipalidad situada en la parte oriente de Santiago.
