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Quintana (PPD) critica que Presupuesto en Educación “no es noble, ni grande, ni hermoso”

“La dirección en las que crecen las ayudas estudiantiles, es lo que cuestionamos, porque favorece el crecimiento de las universidades privadas. Lo que existe, es un aumento de la demanda, no se potencia en lo más mínimo una oferta pública, lo que ampara una competencia de mercado sin ningún tipo de regulación”, sostuvo el senador de oposición.


Parafraseando el discurso que realizó el presidente Sebastián Piñera ante la Asamblea General de la ONU, el senador del PARTIDO POR LA Democracia (PPD) Jaime Quintana criticó duramente la partida de Educación en el  proyecto de ley de Presupuesto 2012, asegurando que es un castigo a la educación pública y que los aportes basales para las universidades estatales crecen un 0% en términos reales.

El presidente de la comisión de Educación del Senado, comparó que “la beca Juan Gómez Millas dirigida a las universidades privadas crece un 373% y la beca para los estudiantes del Cruch, crece sólo un 6,5%. Perdónenme pero no sé como se resuelve el conflicto estudiantil con este nivel de inversión a los estudiantes que por más de cinco meses han estado movilizados”, enfatizó.

“La dirección en las que crecen las ayudas estudiantiles, es lo que cuestionamos, porque favorece  el crecimiento de las universidades privadas. Lo que existe, es un aumento de la demanda, no se potencia en lo más mínimo una oferta pública, lo que ampara una competencia de mercado sin ningún tipo de regulación”, sostuvo Quintana.

En esta línea, el congresista argumentó que “los fondos de educación regional, se encuentre abierto para las universidades privadas, con casas centrales en regiones y las que tienen enormes utilidades como la Universidad Autónoma, del Desarrollo y San Sebastián, varias de ellas pertenecientes a grupos económicos internacionales. ¿Por qué el Estado debe apoyarlas?”, cuestionó.

Jaime Quintana consignó que el ex ministro de Educación, Joaquín Lavín, se comprometió con un fondo de 72 millones de dólares para las universidades estatales y de 15 millones de dólares para las tradicionales del Cruch, “nada de eso viene, a pesar que el propio presidente lo había ratificado”.

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