La parlamentaria socialista será la primera mujer que estará a la cabeza de la Cámara Alta y tendrá la misión, el próximo 11 de marzo, de entregar la banda presidencial a la Presidenta electa, Michelle Bachelet.
La senadora Isabel Allende, hija del fallecido presidente Salvador Allende y que presidirá desde el 11 de marzo el Senado de su país, se declaró este viernes «orgullosa» de haber alcanzado el mismo cargo que ejerció su padre.
«Como socialista estoy muy orgullosa de ejercer el mismo cargo que el presidente Allende», afirmó la parlamentaria por la región de Atacama (norte) a Radio Cooperativa.
«Espero ser una articuladora de las distintas posiciones que se expresen en el Senado, y al igual que mi padre, ser completamente respetuosa de las mayorías y minorías que representan nuestra democracia», subrayó.
Antes de ser elegido presidente de Chile, en 1970, Salvador Allende presidió el Senado entre 1966 y 1969.
Los partidos de la Nueva Mayoría alcanzaron el jueves un acuerdo para que la senadora socialista presida la Cámara Alta durante 2014.
La elección tendrá lugar el próximo 11 de marzo, antes de la sesión plenaria del Parlamento en la que será investida presidenta Michelle Bachelet, que cumplirá un segundo mandato tras haber gobernado Chile entre 2006 y 2010.
Es el titular de la Cámara Alta a quien le corresponde entregar la banda presidencial al nuevo Presidente, por lo que Bachelet será investida esta vez por Isabel Allende, primera mujer que comandará la rama legislativa en los más de 200 años de vida independiente del país.
También el presidente del Senado es el primero en la línea de sucesión presidencial en caso de muerte o inhabilitación absoluta del gobernante para ejercer el cargo.
Para la senadora, hija menor del fallecido mandatario socialista (1970-1973), «entregar la banda a nuestra querida presidenta Michelle Bachelet es una alta distinción».
«Es simbólico que seamos dos mujeres quienes encabecemos esta ceremonia cívica y republicana», remarcó.
Allende manifestó su esperanza de que dicho acto «sea una expresión más de cómo tenemos que seguir avanzando las mujeres en la participación política».
Aseguró asimismo que guiará el Senado para que esté «a la altura de los desafíos» del país, entre los que mencionó la reforma de la educación y la reforma constitucional requerida «para profundizar la democracia».
«Por cierto, trabajaré por obtener los recursos que los cambios a la enseñanza requieren, respaldando la reforma tributaria que la presidenta Bachelet propuso al país», concluyó.
