Juan Luis Fuentes, candidato de Converge e integrante del Movimiento Elegir, afirma que “la motivación de nuestra lista es abrir la federación a todos los estudiantes. Eso implica tomar distintos modos de participación. La Fech hoy no está abierta para todos los alumnos y no es punto de convergencia real para todos”.
El Movimiento Elegir, la Centro de Derecha Universitaria (CDU) y el Movimiento Gremial, tienen la real opción de alcanzar el sitial que por años han estado buscando en la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech), el próximo 3 y 4 de noviembre, con la lista
“Converge” que es la alianza política que busca rescatar a la Casa de Bello como una institución que está con los estudiantes y mantiene alejada a la burocracia tradicional.
En este contexto, Juan Luis Fuentes, candidato de Converge e integrante del Movimiento Elegir, afirma que “la motivación de nuestra lista es abrir la federación a todos los estudiantes. Eso implica tomar distintos modos de participación. La Fech hoy no está abierta para todos los alumnos y no es punto de convergencia real para todos”.
“El rol específico de la Fech, debe orientarse hacia quienes se están haciendo cargo de mejorar nuestro país, independientemente de sus intereses o visiones. En relación al movimiento estudiantil, creemos que las consignas y mensajes deben profundizares en lo importante y, a partir de ahí, generar espacios de reflexión en diferentes temas y, en especial, sobre la calidad en la educación», añade Fuentes.
La alianza “Converge, Juntos por una Chile que transforma”, está llamada a generar los cambios que la universidad necesita. De hecho, uno de sus principios internos y que esperan proyectar, está basado en ser “una Fech preocupada de los estudiantes, con un fuerte rol de posicionamiento del rol público de la casa de estudios, buscando así un punto de articulación entre los distintos actores sociales, con el cual se puedan generar nuevas propuestas para la universidad y el país”.
Hoy, según perciben los integrantes de “Converge”, hay una Fech lejana, despreocupada de los alumnos, la que se establece bajo el único propósito de ser un trampolín político. Esto desencadena una desconexión con temas importantes y que no tienen directa relación con temas ajenos a la política y que a veces “son más importantes”, dice un integrante de “Converge”.
En este sentido, Francisco Montoto, la carta del Movimiento Gremial, explica que “cuando nuestro mensaje como coalición apunta a un foco donde la Fech tenga a los estudiantes como protagonistas, es porque esperamos darle a la Federación prioridades distintas. Actualmente, la mesa ejecutiva liderada por Melissa Sepúlveda sólo está preocupada de salir en la televisión o armar una marcha grande. Por eso los problemas de los estudiantes no han tenido cabida”.
Desde la alianza de centroderecha que espera ganar la Fech, proponen una “federación que sea articuladora y, a la vez, plataforma de los estudiantes. Asimismo, que se preocupe de promover y defender los intereses de los estudiantes”.
Diego Conejeros, la opción de la Centro de Derecha Universitaria (CDU), dice que “queremos darle a la Fech un rol protagónico en el debate educacional. Es clave esforzarnos por una educación justa para todos, enfatizar en la gratuidad de los más vulnerables y en la calidad, además de defender la libertad de enseñanza como principio de una sociedad democrática”•.
Así como hoy las redes sociales establecen comunidades donde se pueden generar espacios de intercambio de información y conocimiento, en las universidades también es importante mantener tales escenarios. Por eso, en “Converge” son claros a la hora de referirse sobre cómo quieren a “La Chile” de hoy.
“Queremos generar una comunidad universitaria basada en la excelencia académica. Además, y considerando que en estos momentos nuestra universidad está plagada de prejuicios, etiquetas, burocracia, poca transparencia, esperamos traer de vuelta algo muy importante para esta universidad: el orgullo y sentido de pertenencia”, explican desde “Converge”.
En este contexto, la alianza de centroderecha de la Universidad de Chile, espera aumentar la participación política, donde los alumnos se puedan hacer cargo de la solución de sus propios problemas, entendiendo que “La Chile es más que la FECh”. También, que sea un punto de encuentro entre “distintos” (pluralismo inclusivo), con personas que se hagan responsables de los problemas del país.
Actualmente, la sociedad civil activa, esa que asume una labor protagónica clave cuando se une para lograr transformaciones y cambios, es la orientación que “Converge” quiere seguir plasmando en la Fech. En esa línea, al interior de la alianza que está llamada a derrotar al “asambleísmo”, plantea una propuesta de educación con una fuerte participación de la sociedad civil organizada y libre. Según plantean desde la alianza de centroderecha, hoy se detecta un mal manejo de la mesa que dirige Melissa Sepúlveda, en términos de la segmentación, segregación y la falta de oportunidades de los estudiantes. Según afirman los jóvenes de estos movimientos, “existe actualmente una falta de confianza y polarización ideológica que no permite el éxito de la casa de estudios a nivel masivo”.
Por esa razón, la propuesta de “Converge” apunta a un fortalecimiento de la educación, una que libere y haga reflotar los talentos y capacidades. También, potenciar una sociedad civil que se haga cargo de los problemas de las personas. Con estos conceptos -según afirman- es posible alcanzar “la confianza, esa que es la base de la libertad”.
El mismo día en que se estará definiendo el próximo presidente de la Fech, estará en juego el nombre de quién liderará el Centro de Estudiantes de Ingeniería Comercial (CEIC) de la Universidad de Chile hasta octubre de 2015.
Ignacia Herrera, alumna de cuarto año de esta carrera -que pertenece a la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de esta casa de estudios-, sostiene que “creemos que el rol que debemos tomar como Centro de Estudiantes, es el de preocuparse del día a día de los alumnos. En la universidad no sólo se viene a estudiar, sino que también a conocer a nuestros compañeros y a crecer y formarnos como profesionales íntegros. Esto es clave desde un eje de fortalecimiento de la comunidad estudiantil, la cual sólo se logra a través de una interacción y empatía entre los propios alumnos”.
Herrera es enfática en relación a cómo se diferenciarán respecto al actual Centro de Estudiantes el cual, según la candidata de la agrupación “La Minga”, se ha politizado mucho y “ese no es el rol que debe tener”. La estudiante agrega que “durante el último año, se ha polarizado a la gente y no se la ha unido a través de las diferentes posturas. Ese es precisamente nuestro sello: queremos unir a todos los alumnos en un ambiente de respeto, en el que todos nos escuchemos y debatamos por un mejor centro de estudiantes. En La Minga estamos todos”.
