«(El proyecto) avanza, pero aparecen a última hora indicaciones que terminan distorcionándola para que todo siga igual», sostienen.
Los diputados Pepe Auth (PPD), Pedro Browne (Amplitud), Nicolás Monckeberg (RN) expresaron a través de una columna de opinión publicada en La Tercera su preocupación respecto a cómo «avanza» la nueva Ley de Partidos Políticos.
«Cuando la Presidenta Michelle Bachelet dio a conocer la agenda de probidad y transparencia, fruto de las propuestas de la comisión Engel, escuchamos rimbombante declaraciones sobre la necesidad de modernizar nuestra democracia. Lo ocurrido en la Cámara de Diputados con la nueva Ley de Partidos Políticos contradice de manera flagrante esos buenos propósitos», advierten los parlamentarios.
Y agregan: «Aunque la motivación y el liderazgo de las distorsiones no fue del gobierno, sino que de los líderes de los dos principales bloques políticos, esto se hizo con el silencio y la omisión gubernamental para defender sus objetivos y también sus compromisos».
Según los legisladores, la Ley de Partidos Políticos avanza, pero aparecen a última hora indicaciones que terminan distorcionándola para que todo siga igual, como elevar las exigencias para constituirse, cambiando las reglas del juego como efecto retroactivo. Esto vulnera el acuerdo avanzado entre el gobierno y los independientes para poner fin al sistema binominal».
«Y para tapar los obstáculos que salieron en el camino, se instalaron artículos transitorios, que, junto con afectar a quienes ya iniciaron sus procesos de constitución, hacen en la práctica imposible que nuevos partidos puedan hacerlo a futuro», recalcan.
Reparan además en que «para permanecer vigente ante la ley, se introdujeron indicaciones exigiendo ser partidos nacionales, lo que atenta contra la descentralización. Una región tiene todo el derecho a tener un partido que defienda sus intereses en el Congreso».
«Se critica la proliferación de partidos, argumentando que se crearán para hacer negocio, lo que es falso: el 80% del financiamiento público se obtiene en función de los votos. Por lo anterior, es fundamental que esta reforma resguarde la independencia con reglas claras de democracia interna, como la elección directa, un militante, un voto, lo que no está claro en el texto», declarán los diputados.
«En política, cuando hayam más partidos, la gente va a sentirse más representada», concluyen.
