“Las vacaciones no son un trámite”: doctora en Educación de la Usach cuestiona las decisiones del Mineduc

La académica del Departamento de Educación de la Universidad de Santiago (Usach), Catherine Flores, cuestionó las decisiones del ministerio de Educación respecto a la programación del año escolar en tiempos de coronavirus, como el sistema de enseñanza a distancia y el adelanto de las vacaciones producto de la pandemia.

La doctora comenzó diciendo que actualmente “estamos en una situación compleja, precisamente porque una de las preocupaciones de los padres es que los estudiantes no están siendo enseñados y que podrían perder el año y el ministerio toma la decisión de adelantar las vacaciones”.

“Yo no comparto esta decisión porque estas no van a ser vacaciones. Los niños y niñas necesitan un periodo de vacaciones reales, en el que ellos puedan disfrutar, compartir con amigos, salir a jugar etc. Y eso no se va a dar en esas condiciones”, mencionó la especialista a Radio Usach.

Asimismo, agregó que “tenemos que concebir que exista una flexibilidad en el currículum”, ya que “las vacaciones no son trámite, no son un concepto administrativo, son parte de la formación integral de nuestros estudiantes y en este momento la preocupación principal es la salud de ellos, ya que están en un grupo de riesgo de salud mental», por lo que es importante «no enfocarse tanto en el contenido academicista o pasar el currículum”.

Clases online

Catherine Flores también se refirió a los problemas que han debido enfrentar, tanto profesores como estudiantes, en este proceso de enseñanza a distancia.

En ese sentido, fue enfática en señalar que “las señales han sido equivocadas, porque el Gobierno intentó seguir y dar la señal a través de la educación online de una aparente normalidad, y eso no existe, el mundo no está funcionando normalmente”.

«Por lo tanto, esta idea de que los estudiantes van a seguir aprendiendo en línea de la misma manera, de mandar guías, hacer que los profesores ocupen un tiempo interminable en hacerlas sin considerar que muchos de los estudiantes no tienen impresora, provoca que en los padres un tremendo factor de estrés», manifestó.

“La señal debió ser que la importancia de la educación ahora más que nunca está presente: y está siendo tan relevante como el tema de la pandemia. La educación no es sólo contenido, no es sólo currículum, no es sólo contenidos conceptuales, hay otros aprendizajes que se pueden lograr por esta pandemia y que también van a enriquecer a nuestros niños”, complementó.

“Hay grandes dificultades más allá de lo tecnológico. Como es sabido, un 40% no posee la conexión adecuada, pero también los profesores están estresados porque quieren hacerlo de la mejor manera en un contexto que no es normal. Lo primero que tenemos que entender es que los profesores y las clases online no van a ser nunca como las clases presenciales y, por lo mismo, no podemos auto exigirnos ni tampoco nos pueden exigir la perfección porque hemos tenido que migrar a un sistema que para la mayor parte de nosotros es desconocido y además que requiere de mucho tiempo para que pueda ser realizado de una forma eficiente”, sostiene.

Desigualdad en el acceso a Internet

Por otra parte, al ser consultada sobre la inequidad existente en los accesos a plataformas web para las clases online, Flores sostuvo que “esta fue una muestra de la mirada elitista del Gobierno, en el sentido de creer que todos van a poder acceder a Internet y no pensar si siquiera que si hay cuatro niños en una casa se necesitan cuatro dispositivos distintos y cuatro espacios, para que esos cuatros niños tengan clases distintas”.

«El error parte de ahí, partió de esta mirada desde una burbuja, de creer que la solución era promover las clases en línea y sin pensar en las dificultades tecnológicas. Esta pandemia ha dejado en evidencia la brecha digital que estaba oculta y cómo hay un sector de la población que tiene acceso a conocimiento tecnológico y a través de la tecnología al conocimiento y al contacto con el mundo y otros que no”.

“Flexibilizar”

Ante la pregunta si es aconsejable congelar el año escolar, la experta contestó que “es un problema, porque los colegios privados están siendo presionados porque los padres no quieren pagar la misma escolaridad, ya que están recibiendo un ‘servicio distinto’, los niños no están yendo a la escuela, están recibiendo una formación online que es menos costosa, por lo tanto, los colegios privados son presionados y los padres, a pesar de tener acceso, están preocupados por otra situación que tiene que ver más con la calidad que con el acceso”.

“Como es incierto, no creo que sea necesario suspender el año escolar, creo que hay que flexibilizar. Primero, hay que tranquilizar a los padres y para eso tiene que haber comunicación de los profesores a los padres y hacia los niños, de manera que los padres no estén viviendo esta situación de estrés solos, que estén acompañados por los profesores y que éstos tampoco estén solos, sin saber que los padres son sus aliados y que los comprenden y entienden que ellos están tan abrumados como los padres, porque ellos están en la misma situación con sus hijos», añadió.

Profesores y Mineduc

Otra de las preocupaciones que nace a raíz de esta contingencia, es la escasa participación de los profesores en la toma de decisiones del Ministerio. En este sentido, la académica es enfática en señalar que “por supuesto, sobre todo los profesores que son los que tienen que enfrentar las condiciones más adversas, además, son actores principales y también están sufriendo las consecuencias de esta situación, porque existen profesores que no tienen acceso a internet, no tiene un buen dispositivo o no tienen buena conexión”.

“A nivel académico nos mantenemos en contacto con la escuela, fundamentalmente por la investigación, por nuestros estudiantes en práctica y por los estudiantes de magíster en educación que tenemos. Ellos nos mantienen al tanto de las realidades de las escuelas, pero en el caso de las autoridades no sé qué tan al tanto están de la situación”, dijo.