Este alimento, que abunda en Domingo de Pascua, puede causar a los canes hiperactividad, vómitos, diarreas, temblor muscular, taquicardia, convulsiones, coma y muerte.
El chocolate es un alimento delicioso para el humano y que se consume en grandes cantidades en Domingo de Pascua, pero puede transformarse en un grave problema de salud para un perro.
Intoxicación grave con la necesidad de ser llevado a una clínica veterinaria para ser sometido a un lavado gástrico puede provocar que un perro coma chocolates.
“El cacao del chocolate presenta de manera natural una molécula llamada teobromina que es una sustancia tóxica y dañina para la salud de perros. Los canes metabolizan de manera muy lenta la teobromina, lo que significa que esta sustancia no se puede eliminar fácilmente de su organismo, y se acumula hasta niveles tóxicos, afectando su salud e incluso pudiendo poner en riesgo su vida”, advierte Herly Studer, médico veterinario de Fit Fórmula.
Comer chocolates puede causar vómitos y diarreas en perros. Otros signos clínicos son hiperactividad, temblor muscular, taquicardia y, si la intoxicación es importante, convulsiones, coma y muerte.
Los síntomas suelen aparecen entre las 4 y 12 horas después de comer chocolates.
El tutor de la mascota debe preocuparse de inmediato al ver los primeros síntomas y llevar a su mascota para ser evaluado por un médico veterinario, quien podría inducir el vómito o efectuar lavado gástrico.
El riesgo de intoxicación además crece en animales de menor tamaño, como cachorros o razas pequeñas, porque hay una mayor proporción de teobromina por kilos del animal.
“Mientras mayor porcentaje de cacao tenga el chocolate, es más riesgoso para la salud del perro”, advierte Studer.
Aunque, en general, los conejitos y huevitos de Pascua tienen bajo porcentaje de cacao, para prevenir es aconsejable dejar estos chocolates fuera del alcance de los perros. Esto significa que al esconderlos para jugar con los niños, es ideal no colocarlos a nivel de suelo para que los perros no los encuentren ni coman.
También es importante enseñar a los niños que aunque amen a sus perros y quieran compartir con ellos, no deben darles chocolates ni huevitos de Pascua. “A los niños hay que explicarles que el chocolate es dañino para las mascotas”, aconseja Studer.
Finalmente, el experto explica que “tenemos muchas otras formas de incorporar a las mascotas en las celebración familiar de Pascua de Resurrección. Hoy existen snacks para regalonear a los perros y que están especialmente formulados para su organismo, como huesos masticables y galletas”.