Publicidad

Salud: Fumar aumenta hasta seis veces el riesgo de infarto al corazón

Muchos fumadores jóvenes desconocen la posibilidad de un ataque cardíaco asociando al cigarro con el cáncer de pulmón. Prevenir eliminando el consumo de tabaco y seguir una vida saludable son la mejor alternativa ante una de las principales causas de muerte en los chilenos.


Fumar se ha convertido en un hábito que, según la Encuesta Nacional de Salud 2010, involucra al 40,6% de la población chilena. La cifra resulta elevada, considerando los nocivos efectos que el consumo de nicotina, alquitrán y monóxido de carbono -como principales componentes dañinos del cigarrillo- generan en el organismo.

Muchos fumadores desconocen que a través de este vicio se produce un daño importante al corazón, ya que más allá de verse afectados por un cáncer pulmonar, aumentan considerablemente el riesgo de padecer un infarto agudo al miocardio.

En el marco del mes del corazón y con la idea de generar conciencia de la peligrosidad que implica el consumo habitual de tabaco en la gestación de un infarto, el cardiólogo de Clínica Vespucio Dr. Leonel López, explica  las perjudiciales consecuencias del cigarro en esta complicación cardíaca.

El infarto agudo al miocardio se produce por la obstrucción completa de una arteria coronaria producto de un trombo o coágulo sanguíneo que impide la llegada de la sangre al órgano vital.

“Al inhalar tabaco, las arterias coronarias se contraen enormemente y aprietan el contenido de las placas ateroscleróticas agudas hasta que revientan, lo que produce acumulación de depósitos de grasa y endurecimiento de la arteria (aterosclerosis). El cigarro además favorece la formación de   coágulos en las arterias, lo que finalmente frena el paso de la sangre al corazón” explica el especialista.

Si bien los ataques cardíacos tienen diversos factores asociados o de riesgo como la hipertensión, obesidad o diabetes, entre otros, López comenta que “el tabaquismo es una de las causas que más predisponen la posibilidad de infartos al corazón, más aún entre la población relativamente joven. En general, las personas no asocian el riesgo del tabaco a los infartos sino al cáncer pulmonar”, comenta.

“Hay estudios internacionales que explican que el consumo de tabaco aumenta hasta seis veces el riesgo de sufrir un infarto cardíaco en personas de menos de 46 años” destaca López. Por ello, vale la pena considerar que el 47% de las personas entre 15 y 44 años fuman, según la última encuesta de la autoridad sanitaria.

Es por esto que la recomendación del cardiólogo de Clínica Vespucio es tajante “hay que dejar de fumar”.  “Quienes fuman deben comprender que no sólo causan su propia muerte, sino que provocan la de sus seres queridos, ya que toda persona que conviva con un fumador, aunque no consuma tabaco, tiene un 20% más de posibilidades de morirse de un infarto que aquellos que no están sometidos a un ambiente contaminado”, argumenta.

El doctor López señala que “aunque los procedimientos quirúrgicos para tratar un infarto son cada vez menos invasivos, el principal consejo es la permanente prevención y desarrollo de una vida sana”. Consumir una dieta saludable, practicar ejercicios, perder peso si está excedido y por supuesto dejar de fumar son claves para evitar el ataque al corazón, conocido como una de las principales causas de muerte en Chile y el mundo.

Publicidad

Tendencias