En 1972 Mayorga era responsable de las bases navales del sur, entre ellas la Almirante Zar, de la ciudad chubutense de Trelew, donde se produjo el fusilamiento de izquierdistas.
El ex marino argentino Horacio Mayorga fue detenido en Buenos Aires por su presunta vinculación con el fusilamiento de 16 guerrilleros en el sur del país en 1972, con lo que suman cinco los apresados por este caso, informaron este sábado fuentes judiciales.
El ex capitán de navío, detenido la noche del viernes, esperaba este sábado para ser trasladado a la provincia de Chubut, al sur de Argentina, para declarar ante el juez federal Hugo Sastre, quien investiga las torturas, homicidios, tentativas de homicidio y la privación ilegal de la libertad de los guerrilleros en la denominada «Masacre de Trelew».
En 1972 Mayorga era responsable de las bases navales del sur, entre ellas la Almirante Zar, de la ciudad chubutense de Trelew, donde se produjo el fusilamiento.
A mediados de agosto de 1972, 25 miembros de grupos armados de izquierda huyeron del Penal de la ciudad de Rawson y tomaron el aeropuerto de la vecina Trelew, donde fuerzas militares apresaron a 19, mientras que otros seis escaparon en un avión a Chile.
Los 19 guerrilleros apresados fueron llevados a la base naval, donde 16 murieron y los restantes sufrieron graves heridas al ser ametrallados en sus celdas en la llamada «Masacre de Trelew», ocurrida el 22 de agosto de 1972, cuando el país era gobernado por el general Alejandro Lanusse, fallecido el 26 de agosto de 1996.
Los portavoces judiciales señalaron que los diarios de aquellos años recordaban que Mayorga viajó hacia la zona del hecho tras la matanza, donde consideró que «lo hecho bien hecho está» y que «se hizo lo que se tenía que hacer».
Esta detención se suma a la del ex marino argentino Carlos Amadeo Marandino, detenido esta semana por su vinculación con el fusilamiento, tras llegar al aeropuerto de Buenos Aires desde Estados Unidos.
El ex cabo primero se presentó el pasado lunes en la sede de la embajada argentina en Washington y manifestó su intención de ponerse a disposición de la Justicia de su país.
En un hecho sin precedentes, Morandino admitió además esta semana ante la Justicia el fusilamiento de los 16 guerrilleros, quienes «fueron acribillados sin ton ni son» y «los mataron como a perros», según la declaración que realizó el detenido ante el magistrado.
Previamente, en Argentina habían sido detenidos otros tres imputados: el ex capitán de corbeta Luis Sosa y los ex oficiales navales Emilio del Real y Rubén Paccanini.
El único de los buscados que permanece prófugo es el teniente de navío retirado Roberto Guillermo Bravo, que reside en Estados Unidos, aunque no descartan la detención de otros ex militares, como Jorge Enrique Bautista, otro ex capitán de navío, puntualizaron las fuentes.
Los sobrevivientes de la masacre, Alberto Camps, María Berger y Ricardo Haidar, fueron quienes primero denunciaron el crimen y, posteriormente, sufrieron la represión política desatada por la última dictadura militar (1976-1983).
EFE
