Salud
Según especialista, el sedentarismo, los problemas de salud y el aislamiento social están complicando el estado de salud de estas personas, especialmente de aquellos que están confinados desde el inicio de la crisis.
Las extensas cuarentenas impuestas por el Ministerio de Salud en diversas comunas y ciudades del país producto del avance del Covid-19 han significado un duro impacto para los adultos mayores, principalmente para los que tienen 80 años o más, que están en cuarentena obligatoria desde fines de marzo, y para los mayores de 75 años confinados desde el 15 de mayo.
Para el geriatra de Clínica MEDS, Juan Carlos Molina, hoy más que nunca es necesario priorizar la atención en la salud mental de las personas mayores, ya que muchas de ellas están presentando cuadros ansiosos o depresivos, por la extensión de las cuarentenas. El aislamiento social les está causando mayor estrés, temor y rabia, en la medida que avanza la crisis sanitaria.
“La falta de estímulos durante el encierro y el sedentarismo están acelerando las alteraciones cognitivas de los adultos mayores. Las consecuencias sicológicas que significan el confinamiento y la soledad en este grupo etario están provocando un nuevo inconveniente: el miedo a contagiarse. Esto está produciendo pánico e inmovilidad en estas personas, lo que está favoreciendo el desarrollo de cuadros de estrés crónico y, en consecuencia, mayores trastornos depresivos”, aseguró Molina.
El geriatra agregó “que hay estar muy atentos a esta condición y buscar ayuda desde el punto de vista farmacológico y conductual. Hay que mantener las relaciones interpersonales, pese al aislamiento físico, y debemos cerciorarnos de que se mantengan comunicados permanentemente”.
Según el especialista, es clave que el entorno familiar los incentive a realizar actividades nuevas durante el confinamiento, con la finalidad de atenuar los cuadros depresivos y las alteraciones cognitivas que están predominando en gran parte de los adultos mayores.
“El sedentarismo puede facilitar caídas y que se pierdan ciertas funcionalidades. Es muy importante hacer actividad física y que se les motive a realizar ejercicios de equilibrio, flexibilidad, fuerza y aeróbico. Un adulto mayor debe tener al día, al menos, 30 minutos de movilidad”, dice Molina.
Molina aseguró que la ansiedad, los trastornos del sueño, las alteraciones de la memoria y los problemas anímicos se han transformado en los principales motivos de consulta en los últimos meses.
“A través de la telemedicina hemos podido encontrar en los pacientes mucha rabia con el confinamiento, ya que la mayoría considera que el Covid-19 les está quitando el poco tiempo que les queda. Gracias a esta modalidad a distancia, se está rompiendo definitivamente con la inequidad del centralismo por la falta de especialistas en provincia, ya que hemos atendido de forma remota a pacientes de Arica, Talca y otras regiones en las que no tenemos centros de salud”, concluyó el médico.
