En Europa, se ha registrado un ligero descenso de 0,1 puntos porcentuales en el porcentaje de mujeres parlamentarias, un dato que se atribuye al auge del populismo y a los buenos resultados cosechados por los partidos de derecha.
Por primera vez en la historia todos los parlamentos del mundo cuentan con al menos una mujer entre sus miembros, según se desprende del informe “Las mujeres en el parlamento 2022”, publicado por la Unión Interparlamentaria (UIP).
Sin embargo, la UIP lamenta que el porcentaje de mujeres parlamentarias se estancase en 2022 en torno al 26,5 %, creciendo tan sólo un 0,4 puntos porcentuales, lo que supuso su incremento más bajo en los últimos seis años.
“Con este ritmo no podríamos alcanzar nuestra meta de paridad de género hasta dentro de 80 años”, ha advertido en una rueda de prensa el secretario general de la UIP, Martin Chungong, quien ha reconocido que las cifras de este año no son lo suficientemente positivas.
Los datos del informe varían en función de las distintas regiones, siendo América la que tiene una mayor proporción de parlamentarias (34,9 %), seguida de Europa (31 %) y África Subsahariana (26,5 %); por debajo de la media mundial se encuentran el Pacífico (22,6 %), Asia (21 %) y Oriente Medio y el Norte de África (16,3 %).
Respecto a las elecciones celebradas en 2022, Chungong ha destacado el caso de Colombia, donde las mujeres ocupan ahora el 29,6 % de los escaños de la cámara alta -un incremento de más de 8 puntos con respecto a los anteriores comicios- y el 28,9 % de los asientos en la cámara baja, lo que supone un alza de más de 10 puntos porcentuales.
Además, el informe de la UIP llama la atención sobre la elevada presencia de mujeres afrodescendientes e indígenas en el nuevo parlamento colombiano
El informe también destaca la situación de la cámara alta de Australia, el único parlamento renovado en 2022 en el que sí se ha alcanzado la paridad de género, con un 56,6 % de parlamentarias mujeres.
En el caso de las cámaras bajas, los países que se han quedado más cerca de la proporción igualitaria fueron Costa Rica (un 47,4 % de las parlamentarias son mujeres), Suecia (un 46,1 %) y Senegal (un 44,2 %).
En Europa, la UIP ha registrado un ligero descenso de 0,1 puntos porcentuales en el porcentaje de mujeres parlamentarias, un dato que el informe atribuye al auge del populismo y a los buenos resultados cosechados por los partidos de derecha.
La organización cita los ejemplos de Bosnia y Herzegovina, Italia, Portugal, Francia, Letonia, Serbia y Suecia, donde la proporción de mujeres en al menos una de las dos cámaras parlamentarias cayó el año pasado.
Por el contrario, Chungong ha llamado la atención sobre Eslovenia, donde la proporción de mujeres en ambas cámaras se situó en un récord histórico del 40 %, quince puntos porcentuales más que hace cuatro años, gracias a un doble sistema de cuotas que se impone tanto sobre el propio parlamento como sobre los partidos políticos que se presentan a las elecciones.
Junto a este tipo de medidas, Chungong ha pedido a los países que extremen sus esfuerzos en hacer que los parlamentos sean espacios más seguros para las mujeres y ha alertado que el clima sexista y el acoso por género no son algo “endémico” de ninguna región, sino que están presentes en todos los entornos parlamentarios del mundo.
En este sentido, el camerunés ha dicho que la violencia psicológica a la que se enfrentan las mujeres por el hecho de ser mujeres en la política se está convirtiendo en uno de los principales motivos por los que éstas deciden no acudir a los comicios o renunciar a sus cargos.
De manera particular, Chungong ha citado las recientes dimisiones de la ex primera ministra neozelandesa, Jacinda Ardern, y de la primera ministra escocesa en funciones, Nicola Sturgeon.