Publicidad
Dolor en las relaciones o exceso de estrés,  entre los motivos más frecuentes de la libido baja BRAGA

Dolor en las relaciones o exceso de estrés, entre los motivos más frecuentes de la libido baja

La libido se puede ver afectada por diversos motivos, como el dolor en las relaciones sexuales, la monotonía, la disminución de las hormonas, la ingesta de fármacos, entre otros. La especialista en sexualidad, Odette Freundlich, profundizó en estos factores, junto con dar consejos para mantener un bienestar sexual.


La libido es diferente en cada persona, ya que está influenciada por factores socioculturales, tipo de educación, religión, edad y puede cambiar dependiendo de la etapa de la vida del ser humano. En el caso de las mujeres, varía de acuerdo al período del ciclo menstrual; por ejemplo, previo a la ovulación, se produce una mayor motivación sexual, pues los niveles de estrógenos se elevan.

Si bien es natural pasar por épocas en las que tu apetito sexual se puede ver disminuido, existen algunos factores que pueden agudizar esta situación. ¿Cuáles son? Conversamos con Odette Freundlich, kinesióloga especialista en sexualidad y directora del Centro Miintimidad, quien nos explicó las 7 causas más comunes que pueden afectar tu libido.

Entre ellos está el dolor en las relaciones sexuales: si hay dolor, evidentemente habrá disminución del deseo sexual. Esto se puede deber a varios motivos, tales como: irritación, inflamación, infección, espasmo o hipertonía de los músculos de tu vagina y del piso pelviano, una cicatriz en el área genital, disminución de la lubricación, patología en el área pélvica (endometriosis, colon irritable, prolapso), entre muchas otras. 

Si sufres de dolor en tus relaciones, la recomendación es consultar con tu ginecólogo y un kinesiólogo experto en sexualidad, para que evalúen las posibles causas y te proponga un tratamiento a seguir.

El segundo es la disminución de los niveles hormonales: durante el climaterio hay una disminución de las hormonas, especialmente la testosterona y los estrógenos. Por lo tanto, puede influir en tu libido, provocar disminución de la lubricación vaginal, atrofia genital y pérdida de elasticidad de los tejidos vulvovaginales. Esto puede producir dolor, erosiones, sangramiento, durante los encuentros íntimos y evidentemente una disminución de la disposición a los encuentros sexuales.

Este se puede contrarrestar yendo a consulta con un ginecólogo experto en climaterio para evaluar un tratamiento de reemplazo hormonal. También, usando lubricantes e hidratantes adecuados en tus encuentros sexuales, dedicando más tiempo a los juegos preliminares antes de la penetración, practicando ejercicios en forma regular o manteniendo una alimentación saludable.

El tercero es el exceso de estrés y cansancio: el estrés es el peor enemigo de la sexualidad, pues se activa una sustancia llamada cortisol, que nos hace mantenernos en alerta y dejar de disfrutar los placeres de la vida.

Se puede contrarrestar realizando actividades que te gusten y que te distraigan, junto con practicar alguna técnica de respiración consciente, expresar tus emociones y sentimientos, delegar tareas y responsabilidades, e intentar dormir 8 horas diarias.

Otro factor puede ser la ingesta de fármacos: hay ciertos medicamentos que influyen en la respuesta sexual y el deseo, especialmente los antidepresivos.

Se puede contrarrestar conversando con tu médico, pidiéndole que te evalúen cambiar el medicamento que estás tomando. Además de no automedicarse. 

El quinto es la mala alimentación: una dieta desbalanceada insuficiente en proteínas, minerales y vitaminas, puede afectar tu libido. Esto ocurre porque los desequilibrios de la ingesta calórica y de nutrientes, disminuyen la producción de ciertas hormonas como la testosterona, la cual está encargada del deseo sexual.

Se puede contrarrestar manteniendo una dieta equilibrada, intentando consumir diariamente todos los alimentos de los grupos de la pirámide alimenticia. Además de hacer ejercicio físico e hidratarse muy bien.

El sexto factor es la monotonía: después de mucho tiempo repitiendo las mismas prácticas sexuales, los encuentros íntimos pueden tornarse aburridos, y esto puede disminuir tu libido.

Para contrarrestarlo se pueden proponer nuevas actividades y renovar el repertorio sexual. También, cambiar de escenario, explorar los sentidos (usando cosmética erótica, con olores o texturas), animarse a usar algún juguete sexual o algún  juego de comunicación erótica, expresar tus fantasías y conversar sobre la posibilidad de realizar alguna de ellas. 

El último es el conflicto de pareja: peleas, discusiones, infidelidad, falta de comunicación, poco apoyo en las labores domésticas, sentimientos de rabia y rencor, repercuten directamente en el apetito sexua

Para contrarrestarlo se puede conversar con tu pareja, expresar lo que sientes, lo que necesitas, lo que te gustaría, para que de esta manera puedan llegar a acuerdos. También es necesario controlar tus impulsos y meditar antes de expresarte en forma hiriente. Y si ves que esto no se puede solucionar, pueden consultar con un terapeuta de parejas, para que ambos puedan expresar sus necesidades y trabajar en ellas. 

La autora del libro “El secreto peor guardado”, señala que el deseo sexual no nace espontáneamente, por lo que hay que crearlo y trabajarlo. Para ello, existen diversas técnicas y herramientas. A su vez, Odette Freundlich quien cuenta con 28 años de ejercicio profesional en el área de la sexualidad, hace un llamado a no suponer que la disminución de la libido significa que tu pareja no te satisface o que has dejado de quererlo/a. Por lo que, si esto se mantiene en el tiempo, la recomendación es consultar con un/a profesional, para encontrar un tratamiento adecuado y personalizado, con el fin de lograr un bienestar sexual pleno.

Publicidad

Tendencias