Publicidad
¿Por qué las mujeres son más vulnerables ante desastres socionaturales? BRAGA Créditos: Pexels

¿Por qué las mujeres son más vulnerables ante desastres socionaturales?

Natalia Mora Olavarría
Por : Natalia Mora Olavarría Periodista en El Mostrador Braga
Ver Más

Ante un desastre socionatural existen factores de desigualdad preexistentes que hacen que un grupo se vea más vulnerable: las mujeres. El Mostrador Braga conversó con tres expertas, quienes analizan las distintas implicancias del género y los riesgos ante estos fenómenos.


La humanidad siempre ha estado expuesta a desastres socionaturales y la consideración del riesgo de estos forma parte del avance hacia un desarrollo sustentable. No obstante, existe un grupo que se ve afectado de manera diferente por fenómenos como erupciones volcánicas, terremotos, tsunamis e inundaciones: las mujeres.

Ante esto, la geóloga enfocada en vulcanología Carolina Geoffroy, quien se dedica a los estudios de peligros geológicos para planificación territorial, aseguró que “mucha gente dice que estos fenómenos nos afectan a todos por igual, pero ahí es donde viene el concepto de desastres socionaturales, ya que, si bien el origen es natural, el hecho de que ocurra un desastre como tal no tiene base solo en el evento mismo, sino que en cómo afecta a quiénes habitan en el lugar. Este se mide desde el concepto de vulnerabilidad, que tiene muchas aristas, puede ser social, físico, entre otros. Dentro del factor social se encuentra el género”.

Por lo mismo, desde el año 2012 en Chile se lleva a cabo la Mesa de Trabajo Gestión del Riesgo y Género coordinada por la Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred, ex Onemi) con el apoyo de diversas organizaciones y del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género. Esta instancia tiene como objetivo promover un espacio de reflexión y coordinación interinstitucional para la incorporación del enfoque de género en la Reducción del Riesgo de Desastres en Chile proponiendo documentos, guías y recomendaciones para ello.

Uno de estos documentos es “Género y reducción del riesgo de desastres – acercamiento a nivel local”, elaborado por el Programa de Reducción de Desastres CITRID de la Universidad de de Chile, publicado en el 2020. En este se asegura que las mujeres son afectadas de manera diferente por los desastres socionaturales y los efectos que estos generan, los que profundizan las brechas preexistentes en relación con el acceso a bienes y servicios.

Según explica Carolina Geoffroy, existen factores sociales en la construcción del riesgo de desastres, por lo cual se puede conectar el riesgo con los modelos de desarrollo, es decir, la magnitud y naturaleza de sus impactos están en directa relación con las inequidades existentes en la sociedad.

Esto lo confirma María Angélica Contreras, geóloga chilena que actualmente trabaja en el servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), quien expresó que, “hay ciertas brechas preexistentes que se amplifican durante episodios de energía de este tipo (…) por eso es que se ha estudiado y documentado que a nivel mundial las mujeres son más impactadas durante y posteriormente a ocurrido estos fenómenos”.

Ante una catástrofe natural, y en la lógica de dar respuesta a situaciones de sobrevivencia en estos casos, se pueden generar vulnerabilidades que afecten a las personas socialmente más postergadas, siendo las niñas y las mujeres especialmente afectadas.

“Dentro de los factores que provocan un mayor impacto en mujeres se encuentran los roles de género, por ejemplo, el rol histórico de cuidadora que ha tenido la mujer, el acceso al conocimiento y a adquirir herramientas que pueden ser relevantes durante un proceso”, aseguró Contreras.

Por su parte, Geoffroy mencionó que estos riesgos tienen distintas etapas que muchas veces no son tomados en cuenta, por lo que expresó que “muchas veces las personas se imaginan los desastres solo como el momento en que ocurre el evento, el momento de emergencia, cuando en realidad el desastre tiene distintas etapas. Luego de la emergencia viene un periodo de reconstrucción, y hay varios estudios que indican que en este momento también la mujer se ve más vulnerable debido a factores como la autonomía, los recursos económicos, e incluso el aumento de la violencia”.

María Angélica Contreras y Carolina Geoffroy llevan a cabo el proyecto “Siguiendo la huella de los gigantes del geoparque Kütralkura”, que es una guía de exploración volcanológica para niñas y jóvenes. El proyecto tiene como base la perspectiva de género y es una recopilación de conocimientos científicos y relatos de mujeres que han vivido erupciones, que busca promover la comprensión del territorio. “Siguiendo Gigantes” es uno de los ejemplos de las acciones que toman mujeres para contribuir a la disminución de las brechas existentes y acercar la información a niñas y mujeres.

Proyecto “Siguiendo las huellas de los gigantes de Kütralkura” @siguiendogigantes

Por otro lado, en marzo del 2023 el Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres (Cigiden) dio a conocer un estudio que asegura que las mujeres son más vulnerables ante el riesgo de desastres naturales en Chile. Sin embargo, estas no son vulnerables en sí mismas, sino que esta vulnerabilidad es una construcción social y cultural, en el marco de relaciones sociales androcéntricas o patriarcales y de escasa capacidad para su abordaje preventivo. Esta realidad se replica en el resto del mundo y ha ido tomando fuerza a medida que más estudios se realizan y lo confirman. 

El estudio realizado por Cigiden señala que hay evidencia que apunta a que las diferencias entre mayores o menores índices de vulnerabilidad al riesgo de desastres se da por las desigualdades existentes en las sociedades, y que la situación que ocurre en cuanto a las mujeres también se replica hacia otras identidades de género y diversidades sexuales. 

Al respecto, la académica de la Universidad de Chile y una de las investigadoras que formó parte del estudio de Cigiden, Karla Palma, aseguró que “no es que el ser hombre o mujer genere una distinción. Son las condiciones asociadas al género o a otras características las que hace que se sea más o menos vulnerable frente a los desastres”. 

“Cuando hablamos de desastres es importante pensar que este en sí no es una condición de algo que tenga que pasar. Los desastres no son naturales, sino que están construidos por diferentes factores, uno de esos son las amenazas y la exposición de las personas frente a estas. Las diferencias sociales marcan una distinción de cómo nos afectan los desastres” manifestó.

Karla Palma, académica e investigadora social, trabaja en el estudio de la relación entre comunicación y temas ambientales. Imagen: ResearchGate.

A su vez agregó que variables como el nivel educacional, el acceso al trabajo, la independencia para tomar decisiones, las labores de cuidado, entre otras situaciones se van sumando y generando mayores niveles de vulnerabilidad frente a los desastres. “La desigualdad estructural de la sociedad hace que estemos en desigualdad de condiciones” mencionó Palma.

Por otro lado, se deben considerar las etapas que mencionaba Carolina Geoffroy, ya que no solo existe el riesgo en sí, sino que también etapas previas y posteriores.

Al respecto, Karla Palma señaló que “es importante considerar que a pesar de que siempre vivimos en riesgo, esto no tiene que necesariamente concretarse como desastre. Hay una etapa previa en la que se puede trabajar para disminuir la posibilidad de que las personas tengan que vivir un desastre”.

Por su parte, Geoffroy, que se dedica al trabajo relacionado a la prevención de desastres, mencionó que la reducción de riesgos de desastres se puede llevar a cabo a través del levantamiento de información para reconocer cuáles son las amenazas en algún territorio en particular, además de desarrollar mapas de susceptibilidad que indican cuales son las zonas con mayor posibilidad de ser afectadas y en base a eso hacer planes reguladores que definan los usos del territorio. 

La importancia de la perspectiva de género

El documento “Género y reducción del riesgo de desastres – acercamiento a nivel local” del 2020, indica que es necesario incorporar la perspectiva de género ante esta problemática, ya que reconoce el derecho a la igualdad y permite que las mujeres no queden invisibilizadas en las distintas fases del riesgo, así como que los hombres no sean estereotipados con los roles tradicionales durante las emergencias.

Carolina Geoffroy mencionó que la perspectiva de género desde un enfoque interseccional es importante justamente porque “es necesario conocer para poder actuar. Creo que el revisar y estudiar los desastres socio-naturales desde una perspectiva de género permite un mayor análisis de las vulnerabilidades”.

Por su parte, Karla Palma también aseguró que “la perspectiva de género por sí sola necesita de otro apoyo, que es pensar en el género, pero de manera interseccional. Esto quiere decir que tenemos que considerar que las mujeres si pueden ser más afectadas, pero no da lo mismo si es una mujer migrante, sin redes, de color, o una mujer indígena que no habla el idioma”. 

“Hay un montón de factores que hay que incorporar en esa mirada. Hay que tratar de entender esas condiciones que van agregadas al género y dentro de eso tratar de construir una visión compleja de lo que implica identificarse como mujer o como parte de la diversidad en el escenario de un desastre”, señaló Palma.

Finalmente, la geóloga María Angélica Contreras expresó que “hay que revalorizar los conocimientos, no solo científicos, sino también el que viene de los habitantes y del conocimiento ancestral. El llamado es a trabajar de manera conjunta, ya sea de forma local o central, en la construcción de una sociedad preventiva”.

Publicidad

Tendencias