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¿Qué son y cómo funcionan las casas de acogida de protección a mujeres? BRAGA

¿Qué son y cómo funcionan las casas de acogida de protección a mujeres?

Antonia Sepúlveda
Por : Antonia Sepúlveda Periodista en El Mostrador Braga.
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En conversación con El Mostrador Braga, la directora nacional del SernamEG, Priscilla Carrasco, señaló que en 2023 se recibieron 121.395 denuncias por violencia intrafamiliar, mientras que 328.493 mujeres fueron atendidas en los ámbitos de Prevención, Orientación e Información y Recuperación.


Las casas de acogida del Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género (SernamEG) son refugios que proporcionan alojamiento temporal, confidencial y seguro a mujeres mayores de 18 años y a sus hijos e hijas menores de 14 años que enfrentan situaciones de riesgo grave o vital debido a la violencia ejercida por sus parejas o exparejas. Estos espacios, de acceso gratuito, ofrecen un entorno protegido donde las mujeres pueden encontrar resguardo frente a la violencia, además de recibir apoyo legal y psicosocial. 

En diciembre de 2023, se dio a conocer una situación alarmante desde el extremo sur del país. Mujeres que habitaban en una casa de acogida en la Región de Magallanes, denunciaron abandono por parte de las autoridades. Las acusaciones incluyen precariedad en los insumos, maltrato, falta de apoyo profesional y condiciones de vida inadecuadas. 

Según información recogida por el medio magallánico El Pingüino, un grupo de mujeres denunció abandono y malos tratos al interior de una casa de acogida del SernamEG. Estas mujeres manifestaron sentirse desprotegidas y marginadas, como si fueran “la escoria de la sociedad”.

Entre las denuncias más graves se reclamó por la precariedad en los insumos de cocina, llegando incluso a la negación de alimento y la restricción de acceso a la cocina, manteniéndola cerrada con llave. Además, se señaló la falta de atención psicológica adecuada, con una profesional que declaró no estar capacitada para llevar sus casos adelante debido a la falta de experiencia y especialización.

Las mujeres también, según denunciaron, encontraron juguetes, ropa y otros elementos escondidos, algunos de los cuales estaban en buenas condiciones. Asimismo, denunciaron amenazas por parte de las funcionarias de la casa de acogida, incluyendo la amenaza de quitarles a sus hijos e hijas y apagar la calefacción de las habitaciones.

Ante estas graves acusaciones, el SernamEG declaró que se rediseñó el plan de intervención psicosocial y se gestionaron recursos para el emprendimiento, la autonomía y la salud de las usuarias. Además, se anunció el cambio de la coordinadora y el equipo de la casa, la flexibilización de los horarios de alimentación y medidas para garantizar el acceso de las mujeres a las instalaciones.

No obstante, pese a que se solicitó la renuncia de la exdirectora regional, Fabiola García Pinto, los recursos de protección presentados por las ex usuarias fueron rechazados por la Corte de Apelaciones en marzo del presente año, “por no existir el supuesto desalojo en que se funda ni derechos vulnerados para las recurrentes”.

Pero, ¿qué son y cómo funcionan las casas de acogida?

Según datos del SernamEG, recopilados por El Mostrador Braga mediante una entrevista con la directora nacional del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género, Priscilla Carrasco, en 2023 se recibieron 121.395 denuncias por violencia intrafamiliar. Respecto del SernamEG, de acuerdo a la oferta programática del año mismo año, “el área de violencia contra mujer atendió 328.493 mujeres. Esta cifra comprende los ámbitos de Prevención, Orientación e Información y Recuperación que ofrece nuestro Servicio”, afirmó.

En Chile, existen 35 residencias transitorias, de las cuales 8 están ubicadas en la Región Metropolitana. Estas casas de acogida son dispositivos diseñados para mujeres que se encuentran en riesgo vital o grave en contexto de violencia, y su ingreso debe ser derivado desde los Tribunales de Familia, Fiscalía, Carabineros de Chile o Centros del Servicio.

El financiamiento de las casas de acogida se realiza a través del SernamEG, que financia las residencias transitorias a través de ejecutores que pueden ser entidades públicas o privadas. En caso de cierre de una casa de acogida, las mujeres son reubicadas en otras residencias en regiones o comunas cercanas para que la medida de protección tenga continuidad.

“En el presente, y luego de haber actualizado la oferta programática según las características y condiciones de la violencia contra las mujeres en Chile, se amplió el abordaje a todas las violencias de género y no solo la circunscrita a la violencia intrafamiliar; asimismo se reconoce y amplía a la diversidad de mujeres. Estos nuevos modelos abordan desde la prevención hasta la atención de víctimas de violencia extrema, los nuevos programas son: Programas de Prevención; Atención Inicial —a través de los Centros de las Mujeres— y atención remota por medio del 1455 que entrega Orientación e Información; y los Programas de Recuperación de las Autonomías que implementa Programa de Residencias Transitorias, Centros de Atención Especializada en violencias de género, y Asesoría Jurídica”, afirmó la directora.

La crisis en la casa de acogida en la Región de Magallanes, pone de manifiesto la urgente necesidad de mejorar las condiciones de atención y protección a las mujeres víctimas de violencia de género en Chile. A pesar de los esfuerzos del SernamEG por mejorar la situación, las medidas tomadas hasta el momento no han sido suficientes para garantizar una atención adecuada y digna de todas las usuarias.

Debido a ello, con la aprobación de la Ley Integral, se insta al Estado a otorgar mayor presupuesto y financiamiento a estas iniciativas con el fin de disminuir y erradicar la violencia contra mujeres y niñas. Sin embargo, es fundamental que estas medidas se implementen de manera efectiva y que se garantice la participación activa de las mujeres en la toma de decisiones y en el diseño de políticas públicas que las afectan directamente. Solo así se podrá erradicar la violencia de género y garantizar una vida digna y libre de violencia para todas las mujeres en Chile.

“Erradicar la violencia de género, necesita una articulación completa de todo el sistema implicado en esta misma. Desde que se recepciona la denuncia hasta que se dicta condena. Es por esto que, por ejemplo, establecer que todos los órganos del Estado deben adoptar medidas internas y coordinarse para la atención y protección y reparación de las víctimas de violencia de género, es un avance profundamente positivo”, concluyó la directora.

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