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La intensidad del rock retro de The Hives

Con el primer single, Walk idiot walk, sonando fuerte en radios y canales de televisión por cable -especialmente MTV-, The Hives lanza su nueva propuesta musical, Tyrannosaurus Hives. Hace algunos años la banda declaró que sólo lanzarían tres álbumes y luego se retirarían. Este es su tercer disco.


La historia de The Hives se remonta a 1993 cuando cinco jóvenes suecos decidieron formar una banda de punk rock. Visiblemente influenciados por agrupaciones como The Chash o The Ramones, el quinteto comenzó a ofrecer presentaciones en vivo que rápidamente provocaron asombro, confusión y por cierto, desprecio. Hacia 1995, The Hives ya eran conocidos en casi todo Suecia, y empezaban a despertar curiosidad en el extranjero.



Nuevos sonidos retro generados con una base punk rock, además de una estética particular y definida, fueron cimentando el camino de la banda. Ya con un nivel de aceptación considerable y con un número importante de seguidores, el lanzamiento del disco debut se hacia inminente. En el ’97 aparece su esperado primer disco denominado Barely legal, donde los sonidos explosivos con un aire a antaño de depurada agresividad, deslumbraron al más escéptico contrario de estos cinco chicos suecos.



Dos años más tarde aparecería su segundo álbum Veni, Vidi, Vicious, un disco ciertamente más maduro pero algo menos estrepitoso que su anterior propuesta. Sin embargo, esta placa significó su consagración internacional, expandiendo su éxito alrededor de todo el mundo. Los acelerados riff y aquellos explosivos e intensos ritmos anejos de The Hives, ya dominaban gran parte de la escena musical global.



En una ocasión, la banda declaró que sólo realizarían tres discos de estudio y se retirarían. Por ello, la espera de su nueva producción venía cargada de una extraña sensación. Así, llegó Tyrannosaurus Hives, un álbum que concentra lo mejor de estos casi diez años de la banda tocando juntos. Con el single Walk idiot walk, sonando fuerte en radios y canales de televisión por cable -especialmente MTV-, The Hives regresa más fuerte que nunca.



Brutal, dinámico y con una propuesta intensamente delirante, el nuevo disco de The Hives viene a coronar una trayectoria súbita pero generosa en buena música. Con una base que une algo de punk de los 70, rock de 60 y mucho estilo propio, la banda sueca logra generar sonidos de progresiva intensidad interpretativa y técnica que se traduce en un lúcido juego entre los riff de guitarras y toda la energía de su vocalista, Howlin’ Pelle Almqvist.



Temas como Abra cadáver, Two-timing touch and broken bones, A little more for litlle you, See through head, Missing link o Dead quote olympics, son algunas de las canciones que marcan el sendero de este intenso rock punk retro al estilo europeo. Algo de The Vines y por cierto, algo de The Strokes se perciben en el estilo de The Hives -aunque estos últimos, algo más agresivos-. Al parecer, una nueva tendencia rockera (que se sustenta en la vieja escuela) para instalarse en la actual escena musical mundial. Bienvenidos sean.



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