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Guillermo Larraín: “La presión que sentimos hoy en la calle del movimiento ‘NO+AFP’ solo va a subir si es que no hacemos algo hoy día” «Hay una oportunidad y un riesgo, ya que en pensiones es muy fácil la demagogia»

Guillermo Larraín: “La presión que sentimos hoy en la calle del movimiento ‘NO+AFP’ solo va a subir si es que no hacemos algo hoy día”

Iván Weissman S
Por : Iván Weissman S Editor El Mostrador Semanal
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El ex super de pensiones y economista de la Universidad de Chile se ha convertido en un influyente actor en el debate, a través de una serie de columnas que publicó en este medio. En una extensa entrevista con El Mostrador Mercados, Larraín explica su propuesta de crear un pilar de la cuarta edad que ha generado entusiasmo en algunos sectores del Gobierno. En su opinión, ningún mecanismo por sí solo (capitalización o reparto tradicional) ofrece una respuesta adecuada. Afirma que al sistema que diseñó José Piñera le faltó solidaridad. Y acerca de la propuesta de elevar en 5 puntos adicionales la cotización, afirma que la posición de las AFP, de que se destinen todos a la cuenta individual, es inviable.


«Es claro que las pensiones son bajas y que las causas de ello son múltiples. El sistema chileno de pensiones tiene un componente muy fuerte de capitalización individual y un colchón provisto por el pilar solidario que es importante pero cuyo nivel y cobertura son menores que lo deseable. La mejor manera de enfrentar un tema tan complejo como el del sistema de pensiones en sociedades que están envejeciendo rápidamente, más allá del financiamiento estatal al pilar solidario, es mezclar la racionalidad del ahorro y del seguro para financiar pensiones».

Así resumió en problema del sistema de pensiones chilenos el economista y ex super de Pensiones, Guillermo Larraín, en una serie de tres columnas que publicó en este medio hace dos semanas y que tuvieron una fuerte repercusión en el mercado, al punto que su propuesta de una alternativa de sistema mixto que incorpore un sistema de reparto para la 4ª edad sería una de las opciones que baraja el Gobierno en su plan para reformar el sistema.

Larraín afirma que ningún mecanismo por sí solo (capitalización o reparto tradicional) ofrece una respuesta adecuada. Y en una extensa entrevista con El Mostrador Mercados, explica que hasta en los países con sistemas de repartos tienen un pilar de capitalización individual y esa es la base de lo que plantea con el pilar de la 4ª edad. “Eso cambia mucho la dinámica en la cual los dos sistemas se integran”, dice.

“Tenemos dos verdaderos problemas en el sistema previsional chileno hoy en día. Uno es que dependemos demasiado del ahorro. Uno de los problemas que tiene es que si, por alguna razón uno no puede ahorrar, porque estuvo desempleado, porque el empleador no te cotizó lo suficiente, porque te tocó una crisis en el momento en que tú eras joven, eso se simplifica por el interés compuesto en el monto final de tu ahorro y, por lo tanto, el monto final de tu pensión», señala.

Y agrega: «Eso es lo que está pasando a las generaciones que están empezando a retirarse ahora y que empezaron a trabajar entre el 75 y el 85. Entonces no hay capacidad de hacer alguna transferencia intergeneracional de riesgos. Y el segundo problema que tenemos es la longevidad, todo el riesgo que existe en longevidad y que se está desarrollando en el mundo, de hecho la semana pasada The Economist publicó un briefing precisamente sobre el tema de la longevidad, y no hay convergencia en la longevidad, no es que vayamos a converger a los 100 o 110 en expectativa de vida, no se sabe».

Acto seguido, explica: «Entonces ese periodo, en el sistema como lo tenemos hoy día gestionado, ese riesgo que en definitiva queremos tener porque queremos vivir más, ese riego hoy está transferido íntegramente a las personas, a través de pensiones más bajas, porque las compañías de seguros y rentas vitalicias, con el ahorro que uno haya logrado acumular, tienen que distribuirlo en más tiempo».

«Entonces la propuesta de la 4ª edad lo que dice es lo siguiente: ese periodo de retiro, que empieza muy temprano en la vida, y que ojalá lo pudiéramos cambiar, es un periodo que es muy largo, y que va acompañado no tan solo por mayor longevidad, sino que por mayor cantidad de vida. Entonces esa mayor longevidad, lo que uno podría hacer es dividirla en dos, un primer periodo que se financie con ahorro, y un segundo periodo que se financie con seguro».

¿Por qué ha costado tanto hacer cambios, no tan solo desde la política sino que de la industria?
-Hay varias razones que se conjugan y no estoy seguro de poder mencionarlas todas, pero una buena parte de las cosas que debiéramos hacer son políticamente costosas.

Larrain afirma que en la reforma original que creó las AFP, la intencionalidad política de José Piñera y de la dictadura no era generar privatizaciones o un gran desarrollo del mercado financiero, “el verdadero objetivo que está escrito en su libro, por ahí por la página 22, es generar la sensación de que cada uno es responsable por su propia vida, esa es la visión ideológica que tiene el sistema de pensiones, entonces yo voy a tener la pensión que corresponde a mi esfuerzo previo”.

Pero agrega que, aunque eso tenga un elemento de virtud, que consiste en decir que efectivamente uno tiene que hacerse responsable de su vida, “lo que pasa, y aquí entro a discutir el tema de solidaridad, es que uno no es necesariamente responsable de todas las cosas que le pasan en la vida. Hay muchas condiciones que te afectan dramáticamente tu desempeño en la vida, entonces lo que le falta a este sistema es solidaridad y lo que hagamos ahora tiene que generar un mecanismo sustantivo de solidaridad”.

Respecto a las propuestas de la Presidenta, con el aumento de 5 puntos en la cotización por parte del empleador, ¿en qué parte te sitúas, en que vaya todo a un fondo común o parte de ello a la cuenta de capitalización individual?
-Uno tiene que ser realista respecto a esto, y yo tengo una opinión fuerte respecto a una de las opciones, respecto a las otras yo creo que se puede ser flexible.

En la que estoy absolutamente en contra es que los 5 puntos adicionales vayan a la cuenta individual. Eso es inviable, porque eso va a ayudar a las pensiones de quienes comiencen a cotizar hoy día y se van a jubilar en 40 años más, y nuestro problema es con las pensiones hoy día y los próximos 10 años.

Durante los próximos 10 años van a estar jubilando las personas que fueron jóvenes durante la gran crisis del 75, la gran crisis del 82 y toda la transformación estructural de la economía chilena. Entonces, el hoyo previsional que trae esa gente es muy grande. La presión que sentimos hoy en la calle del movimiento “NO+AFP” es una presión que solo va a subir si es que no hacemos algo hoy día.

Y dentro de la industria, me parece que sería una visión completamente ciega si insisten en que todo tiene que ir al sistema de capitalización individual.

No tiene ningún sentido. Tal como dije antes, lo que nos falta hoy día es solidaridad y, por lo tanto, una buena parte de esos 5 puntos tiene que ir a solidaridad.

Cómo se repartirá, si es que tiene que ir a un sistema de reparto o 4ª edad, yo creo que en eso hay que ser flexibles, con tal de maximizar el impacto de corto plazo, porque creo que ahí hay un problema real, efectivo, que no está inventado por el señor Mesina.

El señor Mesina puede tener una agenda política particular, pero él está haciendo eco de un problema efectivo. Yo creo que hay que resolver esto con urgencia.

-¿Cuál es tu sensación respecto a este “gran acuerdo nacional” para que se reforme el sistema de pensiones?
-Yo creo que hay una oportunidad y un riesgo. La reforma se planteó al inicio de un periodo electoral que es complejo, y en pensiones es muy fácil la demagogia. El riesgo es que no logremos controlar esto bien, y que se empiecen a filtrar proposiciones demagógicas de todo tipo y, efectivamente, esto puede terminar de una forma no deseada. Eso es lo malo.

Lo bueno es que el Gobierno, que está con un nivel de popularidad muy bajo, tiene acá una oportunidad de dar una respuesta efectiva a necesidades que son reales de las personas. Acá hay una oportunidad de retomar protagonismo realizando propuestas sensatas de alto impacto para la población, entonces me imagino que el Gobierno va a hacer lo máximo que esté a su alcance para poder avanzar en esta dirección.

Si en algo puede colaborar en eso esta propuesta de la 4ª edad, estupendo, yo creo que sería una buena cosa.

Acá la entrevista completa.

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