El nuevo acuerdo alcanzado por el gobierno y parlamentarios de la oposición para legislar sobre la Tasa Máxima Convencional (TMC) anticipa un nuevo choque con el mundo privado.
Ayer por la tarde, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, informó que alcanzaron un acuerdo con los diputados Patricio Vallespín (DC) y Guillermo Ceroni (PPD), que permitiría destrabar el proyecto de ley que busca reducir la tasa de interés máxima que pueden cobrar las entidades que hoy prestan dinero a los chilenos.
Hasta ahora, el proyecto que ya fue aprobado en el Senado y ahora debe ser visto en la Comisión de Economía de la Cámara Baja, cambia la forma de calcular la TMC, definiendo como base del cálculo la TIC (tasa de interés corriente) del segmento de créditos de UF 200 a UF 5000. Al interés de este grupo (hoy en 17,6 %) se le aplica un factor aditivo de 21 puntos para créditos hasta UF 200 y de 14 puntos para préstamos de UF 200 a UF 5.000.
De esta forma, la TMC quedaría en 38,6 % y 31,6 % respectivamente. Larrain informó que se reducirá en un punto porcentual más cada grupo. A cambio, se agregará a la base de cálculo las tasas que se cobran en las tarjetas de crédito de los bancos (que tienen tasas incluso de más del 3 % mensual), el retail y otros proveedores de crédito. Dado que estas tasas son mayores que en la banco en promedio, el gobierno estima que ambos se neutralizarán.
No obstante, fuentes de mercado advirtieron que en el retail y en otros oferentes de créditos más pequeños no se alcanzan créditos de más de UF 200 ($ 4,5 millones), por lo que sus tasas no serían incluidas en la nueva fórmula de cálculo, provocando que en el práctica, solo se produzca la baja en la TMC producto del anuncio del gobierno.
De esta forma, la TMC caería a menos de 38 % en créditos de hasta UF 50 ($ 1,1 millón) y a 30,6 % en préstamos hasta UF 200 ($ 4,5 millones).
Ejecutivos del sector indicaron que esto desconoce todas las advertencias hechas por expertos como el propio Banco Central. En efecto, a fines de noviembre del 2012, el gerente de la división política financiera del BC, Kevin Cowan, planteó en el Congreso la necesidad de “analizar la conveniencia de aplicar un factor aditivo algo mayor, evitando efectos no deseados como una eventual exclusión significativa de deudores”.
Las estimaciones de la banca y el retail apuntan a que una baja muy pronunciada de la TMC podría dejar entre 400 mil y un millón de personas fuera del mercado del crédito.
En el retail reconocieron que hay un sentimiento de frustración, ya que a pesar de que todas las exposiciones durante muchos meses en la Cámara, donde se escuchó a numerosos expertos, gente del mundo académico, industrias y economistas del BC, planteando la preocupación por una pérdida de acceso al crédito en sectores más vulnerables, este acuerdo de algunos diputados con el Ejecutivo va en el sentido completamente contrario.
En todo caso, el acuerdo de Larraín con los diputados de la Concertación, además del presidente de la comisión de Economía de la Cámara, José Manuel Edwards (RN) y Mónica Zalaquett (UDI), incluye una fórmula que permitiría no sólo detener la rebaja de la TMC, sino que revertirla si es que se comprueba una caída en el crédito equivalente al 3 % de los créditos otorgados a personas que hoy pagan la TMC.
Esto ocurriría, explicó Vallespín, al cabo de un año y sólo si la exclusión de clientes se repite por dos trimestres consecutivos. Con todo, el parlamentario reconoce que los proveedores de crédito podrían restringir el crédito para provocar el alza de la TMC, aunque a su juicio, eso sería signo de colusión lo que sería sancionado. Este escenario, a su parecer, tiene bajas probabilidades de ocurrencia.
En el sistema financiero indicaron que la medida también afecta a la banca, pues sus divisiones financieras prestan en un porcentaje cercano al 15 % de sus créditos de consumo al nivel de la TMC y, de hecho, desde septiembre del 2011 (cuando el gobierno anunció el envío del proyecto de ley) la TIC —que sirve de base para calcular la tasa máxima— ha subido más de 4 puntos porcentuales (de 33 % a casi 38 %), lo que ha llevado a la TMC a 57 %, siete puntos más que la tasa máxima existente hace 15 meses.
El acuerdo incluye que la rebaja de la TMC sea gradual. Esto se traduce en que apenas se publique la ley, la TMC caiga 8 puntos porcentuales en el tramo UF 50-200 y 6 puntos en el tramo de hasta UF 50. Luego, señalaron fuentes conocedoras del tema, iría cayendo un punto porcentual por mes, con lo cual alcanzaría la rebaja final entre 16 y 20 meses.
