Consolidado ya su poder en la administración del grupo editorial más poderoso de Chile, Cristián Edwards ahora tiene como objetivo el área editorial y eso implicaría la salida de un histórico: el director periodístico del matutino, Cristián Zegers.
Y para reemplazarlo estaría considerando al saliente director del CEP, quien es hijo del que fuera director del diario entre 1978 y 1982. Fuentes cercanas a la familia Edwards cuentan que Cristián lo tiene en mente y ya lo habría sondeado en forma reservada.
La llegada de Fontaine hijo —que al igual que a su padre, Arturo Fontaine Aldunate, le pidieron la renuncia de forma abrupta—, sería una señal potente de que Edwards pretende hacer cambios importantes al diario que históricamente ha estado asociado a la derecha más conservadora.
“Malos días” se tituló la editorial que escribió Fontaine Aldunate y que le costó las salida de "el decano". En ella criticaba los asesinatos políticos y el manejo económico del régimen de Pinochet.
Lo que le costó el puesto en el CEP a Fontaine Talavera fue su posición crítica frente al lucro la educación y posturas más liberales que comenzaron a incomodar a los empresarios que financian el influyente think tank.
Los cambios en El Mercurio ocurren en momentos en que el negocio de los diarios impresos está muy movido. Hace un par de semanas Edwards terminó de mover sus piezas para consolidar su poder en la parte administrativa con la salida de Jonny Kulka, gerente general y también un histórico. Desde que asumió la vicepresidencia han renunciado nueve gerentes.
En Copesa también hay señales de cambio. Max Sichel, un emblemático del grupo controlado por Álvaro Saieh, renunció a la gerencia general del grupo hace dos semanas. Estuvo casi 10 años al mando.
