Un anciano de 90 años ha llegado todos los días hasta la Plaza de Armas de Santiago para saltar la cuerda por algunos pesos. Según los trabajadores del sector aledaño a la Catedral de Santiago, el hombre sería un ex boxeador a quien la prensión no le alcanza para sobrevivir, por lo que se ve obligado a salir a la calle a mostrar la agilidad que le proporciona su cuerpo evidentemente cansado.