El dirigente del PC, Carlos Lozano, consideró que las anunciadas excarcelaciones de guerrilleros, como lo dispuso un decreto del Gobierno del presidente Álvaro Uribe «no sirven para nada».
El dirigente del Partido Comunista Colombiano (PCC), Carlos Lozano, señaló este lunes que la falta de un interlocutor en las FARC es «un obstáculo» para gestionar la liberación de rehenes de esa guerrilla, como Íngrid Betancourt, tras la muerte de su portavoz, «Raúl Reyes».
«Creo que es un serio obstáculo (la falta de un canal). Es algo que limita este tipo de mensajes con las FARC» (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), dijo Lozano, periodista y director del semanario Voz.
Según Lozano, tras la muerte de «Reyes», alias de Luis Édgar Devia, considerado «número dos» de las FARC en una incursión de tropas colombianas a su campamento en territorio ecuatoriano el pasado 1 de marzo, esa organización rebelde «no ha definido su relevo, por desconfianza».
Las FARC, subrayó Lozano, que en ocasiones ha sido «facilitador» con esa guerrilla, «saben que esa condición de ‘Reyes’ los hizo más vulnerables (…) y esa parte es la que no ve que se haya resuelto» en la búsqueda de acercamientos para la puesta en libertad de los rehenes.
Sin embargo, Lozano admitió que «seguramente» Francia y la Iglesia Católica pueden tener un canal y la manera de encontrar un acercamiento.
«Francia y la Iglesia pueden tener cómo hacerlo (…) no sé el secreto o sus interioridades de qué o cómo se está haciendo», añadió Lozano a Efe.
Reiteró que en varias ocasiones ha señalado que «hay que hacer pública la exigencia a las FARC de liberar a Íngrid (Betancourt) como un gesto unilateral, un gesto de buena voluntad, y luego sí declarar una zona de encuentro, de despeje o como se quiera decir, para que se sienten cara a cara, (Gobierno y guerrilla) para definir el acuerdo humanitario».
Añadió que no cree que haya que «seguir enviando señales de humo o mensajes de computador, pues está visto que eso no se puede hacer»; y explicó que «hay mucha desconfianza por esas formas de comunicación».
El dirigente del PC consideró, por otra parte, que las anunciadas excarcelaciones de guerrilleros, como lo dispuso un decreto del Gobierno del presidente Álvaro Uribe «no sirven para nada».
En ese sentido, agregó Lozano «estoy de acuerdo con el presidente Samper (Ernesto 1994-1998) quien dijo que eso no resuelve nada y es inocuo pues (las FARC) no le van a poner atención mientras no se sientan partícipes de que esas decisiones deben ser conjuntas».
Lozano instó también a que las FARC «entiendan la situación» de salud en que se encuentra Íngrid Betancourt algo que, puntualizó, «no se puede menospreciar», al igual que la presión que hay en torno a su puesta en libertad, así como la de todos los secuestrad
EFE
