El trabajo concluye que el país asiático busca construirse una imagen «positiva» de «amigo y compañero de confianza» en países en desarrollo y busca «fundamentalmente cambiar gran parte de su propia imagen en los medios de comunicación del mundo».
China intenta influir en los medios de comunicación de Latinoamérica mediante acuerdos sobre telecomunicaciones y relaciones con periodistas, según un reciente informe del Centro Internacional de Asistencia a Medios de Comunicación (CIMA).
Los autores del documento, «Winds from the East» (Vientos del Este), Douglas Farah y Andy Mosher, desgranan los «diversos componentes de poder blando» que China utiliza «para influir en los medios de comunicación» en Latinoamérica, África y el sudeste de Asia.
El trabajo concluye que el país asiático busca construirse una imagen «positiva» de «amigo y compañero de confianza» en países en desarrollo y busca «fundamentalmente cambiar gran parte de su propia imagen en los medios de comunicación del mundo».
Sobre la asistencia financiera directa a medios de comunicación, el país es el décimo contribuyente a países en desarrollo, con casi 18 millones de dólares en 2008, según el informe.
Entre los «instrumentos» citados para cumplir este propósito, están algunos más «visibles», como la financiación y lanzamiento de satélites de comunicaciones, como en el caso de Venezuela y un acuerdo con Bolivia.
Pero además documenta viajes pagados a periodistas latinoamericanos o invitados a dictar conferencias, la expansión de su red de institutos culturales en la región y las visitas de políticos chinos de alto rango para reforzar lazos mediáticos.
Los autores consideran que, «debido a los limitados recursos» de algunos medios latinoamericanos, «viajar al extranjero es una importante extra y un potencial incentivo para publicar historias favorables» a China, a menudo con el requisito de escribir cierto número de informes favorables.
Otra de las acciones citadas es la organización de conferencias mediáticas «a gran escala» que, según el informe, han supuesto en los últimos cinco años al menos seis visitas de delegaciones latinoamericanas.
En relación a la red de institutos culturales, el informe destaca que entre 2006 y 2008 se han abierto diecisiete en ocho países, incluidos cinco en México, tres en Perú y dos en Colombia, Chile y Brasil, y otro en Argentina, Cuba y Costa Rica.
Otro de los aspectos que mencionan es la expansión de la agencia de noticias Xinhua, que es además responsable de la televisión CNC World.
El informe añade que mientras la mayoría de gobiernos recortan sus gastos en medios de comunicación, China provee internacionalmente millones de dólares, algo que, señalan, «es inusual en el contexto global actual».
Los autores creen que los chinos «tienen muchas probabilidades de avanzar de manera importante» en la competición mediática mundial y expresan la «preocupación» de que «la forma de periodismo exportado» por China tenga «menos libertad e independencia que el de medios de comunicación de las democracias». EFE