En el último tiempo Chile ha sido asolado por diversos fenómenos de la naturaleza que han provocado importantes consecuencias en la población. El fenómeno de la sequia que han padecido distintas áreas del país, con las consecuencias en las plantaciones, la escasez de lluvias en el sur, con el cambio en la vegetación, y que ya no esté el característico verde de su suelo en verano. Los incendios forestales, directamente relacionado con la escasez de lluvias, que quemó bosque nativo y árboles milenarios. Estos hechos ya serian suficientes como para que se instalase en la población una reflexión sobre las causas de esto. La organización meteorológica mundial (O.M.M.) ha declarado que el año 2014 fue el año más caluroso desde que se tenga registro. Esta reconocida organización confirmó la tendencia continua al calentamiento global y alertó sobre el riesgo de sufrir cada vez más sus consecuencias. Tenemos entonces que la tesis del calentamiento global se encuentra confirmada científicamente por abundantes estudios. El grupo intergubernamental de expertos sobre cambio climático (I.P.C.C.) informó, luego de su ultima reunión que se encuentran 90 % seguros que este calentamiento global que estamos sufriendo es debido al aumento de la concentración de gases de efecto invernadero producido por actividades humanas ( antropogénico), por el CO2 de combustibles fósiles, por la deforestación, etcétera.
Aparte de los antecedentes recién señalados , que ya se encuentran ratificados, existen varios grupos de geólogos que están señalando que el aumento en la actividad sísmica tendría relación con el calentamiento global ( Bill McGuire de la Universidad College de Londres señala que el aumento de los océanos produce presión en las placas tectónicas), también recientemente en periódicos como el Newsweek y el Time han publicado artículos señalando a geólogos ( Compton y otros) que asocian el aumento en la actividad volcánica con la fusión del hielo de los volcanes provocada por el calentamiento global.
En Chile hemos estado afectados por distintos fenómenos que han impactado y dañado en forma importante a nuestra comunidad; mencionaba al comienzo a la sequia ( el calentamiento global produce años de sequia y años de inundaciones) y sus efectos tanto en la actividad económica ( Agricultura), los incendios forestales que han afectado a parques nacionales, pero también tuvimos un aluvión producto de lluvias en el norte, en zonas en que este tipo de fenómenos son raros ( como efecto de este cambio climático), este aluvión dejó pueblos invadidos de agua y barro, con imágenes que a todos nos impactaron. Aparte de estos, que tienen una relación directa y evidente con el calentamiento global, existen geólogos que estudian la relación del calentamiento con los otros fenómenos que nos han estado afectando, como son las recientes erupciones volcánicas del volcán Villarrica y del volcán Calbuco, y otros proponen su asociación con el reciente terremoto en Nepal. Estas últimas ideas son argumentos que se están pensando y discutiendo , que no están probadas como las primeras, solo las enuncio acá con la idea de lo impresionante que implica el que en Chile a pesar de todo esto no se haya producido una discusión seria social sobre el calentamiento global ni sobre los cambios de vida que debiéramos hacer para enfrentarlo ( decía que se encuentra un 90% seguro que su origen es antropogénico).
[cita tipo=»destaque»]La negación que existe en Chile y el mundo en general, que genera una escasez de pensamiento existente en relación a nuestra responsabilidad en los distintos desastres naturales que como comunidad hemos estado viviendo es evidente.[/cita]
Para mí como psicoanalista hay varios fenómenos que son interesantes en todo esto, pero uno de ellos es la profunda negación social frente al fenómeno, probablemente todos han escuchado sobre el calentamiento global, pero muy pocos lo consideran seriamente, a pesar de todos los fenómenos que nos rodean. Existe una importante negación social al respecto. La negación es un mecanismo de defensa al que todos acudimos en cierta circunstancia, pero que puede llegar a ser muy peligroso. Es el ver algo pero preferir no asumir haberlo visto. Este es un mecanismo que incrementado lleva al rechazo de la realidad y a la psicosis. El calentamiento global genera angustias profundas en relación a un planeta que estamos destruyendo. El planeta, inconscientemente está relacionada con nuestra madre que nos acoge y nos da un lugar . La posibilidad de daño del planeta genera angustias catastróficas que se prefieren negar porque pueden sentirse como impensables por la intensidad de las angustias despertadas. Estas ansiedades remiten a nuestra infancia y nuestra sensación de haber dañado a nuestra madre, sensación que muchas veces fue superada al ver que nuestra madre, a pesar de nuestra agresión inconsciente se mantenía igual que siempre, o por otro lado se prefirió negar frente a lo doloroso de considerar que se dañó a la madre que nos alimentó, lo que es generador de importantes sensaciones dolorosas de tipo depresivo, que puede negarse defensivamente y mantener separada a una madre cariñosa y otra persecutoria ( la dañada es una madre que se evita y de la cual no se desea saber para evitar el dolor del daño realizado), esto facilitó el que desestimáramos nuestra agresiones inconscientes a nuestra madre, negando estas emociones. En el caso que estamos discutiendo, decía que el daño al planeta generado por nuestra forma de vida desconsiderado hacia los recursos que el planeta nos da, esto es, la tala indiscriminada de bosques dada por una voracidad económica, o un consumismo acrecentado, etcétera, genera un recuerdo de este periodo infantil en que vorazmente podíamos desear más y más de la madre, dañando finalmente el pezón del pecho que nos daba la leche, cansando a nuestra madre de nuestras demandas continuas. Esta es la emoción que se niega hoy al tener los antecedentes que nuestro planeta- pecho se está dañando y ya no nos puede dar sus productos como lo hacía antes, pero ha sido muy difícil de considerar seriamente el estado del planeta y asumir responsablemente que nuestra voracidad social ha generado esta situación, y mientras esto no sea elaborado, no se modificará, o se empeorará ( debido a lo antropogénico del calentamiento global). Se prefiere mantener la ilusión de un planeta omnipotente que niega nuestro accionar sin consideración ninguna por el estado de la tierra y sin preocupación por ella. Esta negación es un tipo de defensa maniaca, en la que no se considera que nuestros actos pueden dañar o afectar, evitando el dolor de nuestra responsabilidad.
La negación que existe en Chile y el mundo en general, que genera una escasez de pensamiento existente en relación a nuestra responsabilidad en los distintos desastres naturales que como comunidad hemos estado viviendo es evidente. La correspondencia existente entre el calentamiento global y la sequia, los incendios forestales, el aluvión en el norte es innegable, sin embargo parece que la respuesta ha sido o una proyección de responsabilidades en el gobierno de turno a través de una adjudicación mágica ( que el presidente Piñera o la presidenta Bachelet son «yetas»), una salida de humor negador, o una posición en que existe una preocupación por los sucesos pero sin un análisis de su generación o de las acciones para evitar nuevos desastres, dejándose esto en el gobierno como podría ser el que los padres lo resuelvan, asumiendo una posición infantil. La adjudicación ya sea seria o humorísticamente de características mágicas implica elementos atemorizantes que son proyectados, en respuesta a la sensación de nuestra voracidad o mal trato. Estos son mecanismos propios de una defensa maniaca, que evita tomar contacto con ansiedades depresivas necesarias para un enfrentamiento realista y una modificación responsable de aquellas características de nuestro modo de vida disruptivo para con nuestro planeta y medio ambiente.
