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El fin de la hepatitis c en chile está a un paso (legal)


Cuántas personas tienen Hepatitis C en Chile, aunque usted no lo crea, aún es una incógnita.

Estudios hablan de hasta 150 mil personas, la gran mayoría sin saberlo. Muchos de ellos morirán por causa de esta enfermedad sin haber sido diagnosticados.

A pesar que existen fármacos que incluyen el principio activo Sofosbuvir que permiten la cura del 100% de los casos; su precio impide su acceso a la mayoría de los pacientes: en farmacias llega a los 40 millones de pesos por paciente, precio que deben pagar íntegramente quienes quedan fuera del AUGE, que contempla entregar esta terapia sólo a 300 pacientes. Por este concepto, el Ministerio de Salud paga seis millones de pesos por persona.   

En la India, esos mismos medicamentos están disponibles a precios increíblemente más baratos (pueden llegar a menos de 300 mil pesos), incluso por medicamentos bajo licencia del titular de la patente respectiva. Sin ir tan lejos, en Argentina los precios son sustancialmente menores.

[cita tipo=»destaque»]Confiamos que el Ministerio de Salud y el Presidente Piñera tendrán el liderazgo para construir por sobre lo avanzado y aprovechar esta oportunidad histórica y erradicar la Hepatitis C de Chile, como se ha comprometido nuestro país junto a la comunidad internacional.[/cita]

Si bien humanamente es inaceptable, desde el punto de vista económico se puede comprender que, a seis millones de pesos por paciente, el Estado no pueda costear el medicamento para todos los que lo necesitan. Si lo compra sólo para 5.000 pacientes, el valor sería superior a los veinte mil millones de pesos. $ 20.000.000.000, lo que no resulta factible.

Hasta ahora el Ministerio de Salud no ha podido aprovechar los costos más bajos que ofrece el mercado internacional de esos medicamentos y así aumentar la cobertura, por estar impedido de comprar a otro que no sea el proveedor que tiene registrado en Chile los derechos de patente sobre esos medicamentos.

Sin embargo, después de dos años de trabajo educando sobre el buen uso del sistema de patentes, tanto a pacientes como sociedad civil y autoridades, iniciado por Corporación Innovarte, con el apoyo de pacientes, la Fundación Nuevo Renacer, y el compromiso de legisladores de distintos sectores políticos (Giorgio Jackson, Karla Rubilar, Miguel Ángel Alvarado, Eugenio Tuma, Gabriel Boric) y el apoyo de muchos otros, esa restricción ya puede ser superada.

La Cámara de Diputados por unanimidad  adoptó en enero de este año una Resolución  que declaró que se justificaba por razones de salud pública el otorgamiento de una licencia obligatoria para permitir la importación o fabricación de medicamentos para la Hepatitis C a costos más reducidos y, por su parte, el Ministerio de Salud ha resuelto lo mismo hace unos días (copia de la Resolución en pie de página).

Con ello, se cumple con el requisito que establece la ley de propiedad industrial de Chile, para que el Director del Instituto Nacional de Propiedad Industrial INAPI, previo requerimiento, pueda otorgar la licencia obligatoria que levanta el monopolio para la venta de esos medicamentos, como ya lo ha hecho, por ejemplo, Malasia.

Así las cosas, debemos celebrar que ya se encuentra abierto el camino para que el Ministro de Salud, Dr. Santelices, demande ante el INAPI dicha licencia para que los servicios de salud puedan proporcionar los medicamentos para la Hepatitis C para todos los chilenos que lo necesitan.

Confiamos que el Ministerio de Salud y el Presidente Piñera tendrán el liderazgo para construir por sobre lo avanzado y aprovechar esta oportunidad histórica y erradicar la Hepatitis C de Chile, como se ha comprometido nuestro país  junto a la comunidad internacional.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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