Un perro que vomitó un libro. Entre las hojas un grabado. El perro era una puerta al Chile correcto. Se lanzó al Mapocho gritando un número que hizo que a todas las mujeres a la redonda les llegara la regla violentamente. Tengo ese papel y 40 años después digo que éste es el verdadero escudo de Chile.
El Kuntur representa al norte, al Chile altiplánico, aymará. El espíritu que vuela por EL CIELO.
La Tren-tren representa al sur, al Chile boscoso, mapuche. El espíritu que se arrastra por LA TIERRA.
La unión del cielo y la tierra; la serpiente con plumas de ave es el ideal americano. La mente y el cuerpo de nuestro territorio. El principio masculino, el aire, la mente. El espíritu femenino, corpóreo, sensóreo. Las bodas alquímicas del rey del cielo y la reina de la tierra. El nacimiento del único, el que trae la luz después de las tinieblas, el andrógino, la estrella solitaria.
Es importante cambiar nuestro escudo nacional para irnos sintonizando cada vez más con ese Chile sutil que vibra un poco más allá.