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Asesinan a sacerdote en la Catedral Metropolitana

Si bien el móvil parece ser las motivaciones "satánicas" del homicida, lo cierto es que el desafío de los investigadores está en determinar la conexión entre Gazziero y Orias, de los cuales sólo se sabe que tienen un origen regional común.


La del sábado 24 de julio era una misa más para el sacerdote Faustino Gazziero (69), en la Catedral Metropolitana de Santiago. El oficio religioso había comenzado a las 17:30 y nada hacía presagiar lo que sucedería. Luego de concluir la ceremonia, un joven vestido de negro se acerco a Gazziero, quien pertenece a la orden de los Siervos de María, y lo apuñaló causándole la muerte.



Los feligreses no daban crédito a lo que estaban presenciando. Algunos arrancaron, otros fueron a buscar ayuda y los más avezados intentaron ayudar al sacerdote. El asesino aprovechó la sangre de Grazziani para pasarla por su rostro y luego se infirió heridas que obligaron a trasladarlo a la posta central.



La primera autoridad en llegar al templo, corazón de la Iglesia Católica, fue el subsecretario del Interior, Jorge Correa Sutil, quien expresó su pesar a la Iglesia, a nombre del Presidente de la República.



Después fue el turno del alcalde de Santiago, Joaquín Lavín, quien anunció acciones legales para que el individuo no pueda salir de prisión.



En tiempo record, las policías pudieron determinar la identidad del joven. Se trata de Rodrigo Orias Gallardo, de 25 años, sin antecedentes policiales anteriores y de quien se descartó que haya estado bajo los efectos del alcohol y drogas.



Orias había llegado hace tres semanas a Santiago, preveniente de Coyhaique. Vivía en una pieza de la calle García Reyes. Según quienes lo conocían, era un tipo educado, que le gustaba el "rock" y que quizás lo único más extraño era que dormía con sabanas negras.



Su aspecto, los gritos "satánicos" proferidos en la Catedral y los antecedentes entregados por sus padres, en la XI Región, revelaron que pertenecía a una secta denominada "los negros". Si bien el móvil parece ser sus motivaciones "satánicas", lo cierto es que el desafío de los investigadores está en determinar la conexión entre Gazziero y Orias, los cuales sólo se sabe que tienen un origen regional común.



Sin embargo, la Iglesia se ha adelantado en descartar alguna venganza, ya que el religioso se vino a Santiago hace 25 años.



Obispo Infanti



Desde la región de Aysén se traslado en forma urgente a la capital el Obispo José Luis Infanti, quien conoció muy bien a Gazziero, porque pertenecía a la misma congregación y por haber sido también profesor en el Liceo San Felipe Benicio, en Coyhaique.



Infanti señaló que la tragedia le impide por ahora realizar una reflexión más profunda por lo acontecido: "todavía estamos muy sumergidos en la tragedia y no ha habido tiempo para hacer muchas reflexiones. Sin embargo, yo celebré la misa esta mañana, porque sé que el ser cristiano lleva en sí, como esencia, el ser mártir, el entregar la vida por los demás. Entones, todo cristiano debería estar preparado para entregar su vida cada día", dijo el obispo.



Agregó que visitará al homicida, Rodrigo Orias, para ofrecerle la posibilidad de recapacitación y perdón: "la idea es participar en los funerales y ver en qué medida puedo ver al agresor, porque la Iglesia está llamada a comprender, a ofrecerle el perdón y a solicitarle una recapacitación por este daño que ha hecho", concluyó el obispo.

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