El gobernante, junto con deplorar las molestias que generó la huelga en la comunidad,afirmó que «pretender paralizar la ciudad, alterar el normal desenvolvimiento de la gente, impedir a las personas desplazarse con libertad, atenta contra el estado de derecho y atenta contra la democracia».
El Presidente Sebastián Piñera definió de «inaceptable» el paro de actividades desarrollado este miércoles por los conductores de taxis colectivos, que bloquearon las principales avenidas de la capital, generando serios trastornos en el tránsito.
El gobernante, junto con deplorar las molestias que generó la huelga en la comunidad, respaldó que el gobierno esté invocando la Ley de Seguridad del Estado a fin de sancionar penalmente a los responsables de los hechos.
«Lo que hicieron hoy día algunos dirigentes de taxis colectivos es inaceptable, pretender paralizar la ciudad, alterar el normal desenvolvimiento de la gente, impedir a las personas desplazarse con libertad, atenta contra el estado de derecho y atenta contra la democracia. Por eso que decidimos invocar una ley de la República, la ley de Seguridad del Estado», fundamentó.
«En esto quiero ser muy claro, el gobierno tiene una total convicción y firmeza en respetar y hacer respetar el estado de derecho y va a aplicar todo el rigor de la ley a quienes pretendan violar esa ley y va a aplicar todos los instrumentos del derecho para proteger a la gente inocente, a las inmensas mayorías que merecen y quieren vivir en paz y tranquilidad», explicó.
En el marco de su gira por Paraguay, Piñera dijo que «todos tienen derecho a manifestarse y a protestar en un régimen democrático como el que tenemos en Chile, pero nadie tiene derecho a quebrar la ley y en consecuencia nuestro Gobierno va a defender el estado de derecho y el orden público».
«Porque defendiendo el estado de derecho y el orden público estamos defendiendo la democracia, estamos defendiendo a las grandes mayorías y estamos defendiendo a los más débiles», declaró el mandatario.
«Hace una semana atrás cuando un grupo de encapachados en forma sistemática y planificada, tomó un bus del transporte público, desalojó violentamente a sus pasajeros, golpeó al conductor y finalmente lo incendió, aplicamos la ley de seguridad del Estado. Hoy día en que un grupo de personas interrumpieron el normal funcionamiento de la ciudad, ha pretendido tomarse las principales vías de la ciudad, también decidimos invocar la ley de Seguridad del Estado», detalló.
Uno de los puntos conflictivos de la protesta fue la intersección de Vicuña Mackenna con Américo Vespucio, donde Carabineros arrestó a una docena de choferes. Al mediodía la cifra de arrestados había superado la veintena.
El hecho causó molestias en los usuarios de autos particulares y del Transantiago, muchos de los cuales se bajaron de los buses para dirigirse a las estaciones cercanas del Metro.
Al igual que en Santiago, la protesta afectó a los habitantes de Concepción, Puerto Montt, la Serena y Valparaíso.
«La difícil jornada de hoy afectó a miles de usuarios del transporte público, automovilistas y muchas personas que quisieron trasladarse a sus trabajos, lugar de estudio, hospitales y a realizar sus trámites y no pudieron hacerlo normalmente, por los intereses particulares de un grupo de dirigentes de los taxis colectivos», dijo el ministro de Transporte, Pedro Pablo Errázuriz.
El secretario de Estado lamentó profundamente la situación vivida por los usuarios hoy y reiteró su llamado a los dirigentes de los taxis colectivos a usar el diálogo como el camino correcto para resolver sus demandas.
Errázuriz sostuvo que este gobierno entiende las solicitudes del gremio pero que no aceptará que se bloqueen las calles de Santiago y regiones y se genere este «enorme daño a las familias chilenas».
La autoridad afirmó que, de acuerdo a un informe realizado por la Unidad Operativa de Control de Tránsito (UOCT) sólo en Santiago, más de un millón de personas se vieron afectadas por esta interrupción del tránsito, quienes tuvieron que enfrentar en las vías bloqueadas una duplicación en los tiempos de viaje.
Esta movilización afectó también a Transantiago, donde cerca de 200 mil usuarios debieron enfrentar un incremento de 30 minutos en sus tiempos de viaje.
Según el informe de la UOCT las mayores dificultades ocurrieron en Avenida Pajaritos, Vicuña Mackenna, Gran Avenida y Autopista del Sol. También se enfrentaron problemas en Camino a Melipilla, La Florida y calles locales de Américo Vespucio.
