En medio de su discurso, el mandatario anunció el envío de un proyecto de ley que busca premiar la maternidad, entregando un beneficio a todas las parejas que tengan a futuro tres o más niños. También abordó la reducción de la victimización de la delincuencia, anunciando de paso que enviará un proyecto de ley que sanciona como delito los insultos a Carabineros o funcionarios de la PDI.
La última cuenta pública del 21 de mayo del Presidente Sebastián Piñera estuvo marcada por el anuncio de un bono para las familias que tengan tres o más hijos y el kínder obligatorio para todos los niños del país.
A las 09:30 horas, el mandatario inició la entrega de su último mensaje a la nación, el cual correspondía al balance de su gestión y la entrega de anuncios que delinearán su mandato hasta marzo de 2014. Sin embargo, lo inédito del discurso presidencial de este año fue la exhibición de un video sobre la reconstrucción en los lugares afectados por el terremoto y posterior tsunami del 27 de febrero de 2010.
Piñera centró su discurso bajo el título de “Chile avanza con todos”, colocando énfasis en plantear medidas para mantener y avanzar respecto al crecimiento económico, la estabilidad y la calidad de vida de los chilenos.
En sus primeras palabras ante el Congreso Pleno, Piñera señaló que «hoy, en que por mandato constitucional me corresponde dar cuenta al país del estado de la Nación, quiero invitar a todos mis compatriotas a que nos tomemos una pausa y hagamos una reflexión, breve pero integral, y volquemos por un instante nuestras miradas, mentes y corazones hacia este gran país que juntos estamos construyendo».
Uno de los puntos con los que el jefe de Estado abrió y cerró su intervención fue la aceptación de errores durante su gestión, ocasión en que afirmó que «sin duda gobernar no ha sido una tarea fácil. Hemos cometido errores pero también hemos entregado nuestro mejor esfuerzo por cumplir nuestros compromisos con todos los chilenos. Y hoy podemos comenzar esta cuenta diciendo: Chile está creciendo con fuerza».
Al término de su discurso, Piñera retomó este punto y señaló que «quiero aprovechar esta última cuenta pública para reconocer que hemos cometido errores. Pero también para asegurar que siempre hemos actuado de buena fe y entregado lo mejor de nosotros mismos con un solo norte: mejorar la vida de los chilenos y facilitar su camino hacia una mayor felicidad. Seguiremos trabajando con la misma fuerza y compromiso hasta el último día de este gobierno».
En medio de su discurso del 21 de mayo, Piñera anunció el envío de un proyecto de ley que busca premiar la maternidad, entregando un bono a todas las parejas que tengan a futuro tres o más niños.
«Es preocupante la brusca caída en la tasa de natalidad que afecta a nuestra sociedad. Si los índices de natalidad de comienzos de los 90 hubieren permanecido, hoy tendríamos un millón de niños adicionales jugando y alegrándonos nuestras vidas», comentó el jefe de Estado.
El bono que impulsa el gobierno se iniciará con la entrega de $ 100 mil al nacimiento del tercer hijo y llegará a $200 mil con el nacimiento del quinto niño.
Además, Piñera dijo que se duplicará el número de tratamientos de baja complejidad contra la infertilidad que serán prestados por la Red Pública de Salud y las instituciones con convenio. El objetivo que se persigue es el de facilitar los tratamientos contra la infertilidad de parejas que buscan tener hijos.
Durante las dos horas y media que duró su discurso, Piñera fue enfático en hacer hincapié en las diferencias existentes entre su administración y la de los gobiernos anteriores, especialmente con la abanderada del PS-PPD, Michelle Bachelet.
Durante su alocución, el mandatario repasó en varias oportunidades que su gobierno tuvo que enfrentar dificultosas condiciones, debido al contexto en que habría recibido el país cuando asumió la primera magistratura.
«Sin duda nos ha tocado gobernar en tiempos muy difíciles. Cuando asumimos la economía estaba perdiendo su capacidad de crecer, crear empleos e incrementar los salarios. La pobreza y las desigualdades estaban aumentando. La calidad de la educación permanecía estancada. La inversión y la productividad estaban cayendo y nos estábamos alejando de los necesarios equilibrios macroeconómicos», espetó.
Respecto al crecimiento que ha mostrado el país en los últimos tres años, Piñera dijo que “Chile ha crecido en promedio al 5,8 % anual, superando ampliamente el crecimiento del período anterior, de América Latina y del mundo, y alcanzando el primer lugar entre los países de la OCDE. Nuestro PIB per cápita, que en 2009 rondaba los US$ 15 mil, hoy se acerca a los US$20 mil. Como Presidente de todos los chilenos no puedo dejar de sentir orgullo por Chile, cuando en medio de un mundo lleno de incertidumbre, estos logros son reconocidos y admirados en el exterior».
Al mismo tiempo, cuando abordó el tema del empleo, el jefe de Estado afirmó que «en los últimos tres años, los salarios reales han crecido un 10 %. Y con mayor intensidad en los grupos más vulnerables, acortando así, según los datos de la Encuesta de Empleo de la Universidad de Chile, la brecha salarial».
Sobre los acuerdos internacionales y el aumento de la economía nacional producto de estos nuevos lazos comerciales, Piñera dijo que «este esfuerzo de integración no ha sido en vano. En los últimos tres años nuestras exportaciones aumentaron más de un 40 %, pasando de US$ 55 mil millones a casi US$ 80 mil millones. Y el año pasado Chile fue el segundo mayor receptor de inversión extranjera directa en Latinoamérica, con cerca de US$ 30 mil millones, sólo superado por Brasil».
Asimismo, el mandatario abordó tres desafíos centrales como son el de la energía, el agua y la infraestructura, comparando con cifras y datos a los resultados que tuvieron las anteriores administraciones.
«En materia de energía, qué duda cabe, nos ha costado más de la cuenta. Al alza de los precios internacionales del petróleo, del carbón y del gas natural, se suma una severa sequía que se extiende ya por cuarto año consecutivo y que ha reducido a menos de un tercio las reservas hídricas de nuestros embalses», expuso.
«Entre los años 2000 y 2011 prácticamente no se inauguró ningún nuevo embalse en nuestro país. Hoy estamos impulsando la construcción de 16 embalses durante esta década, de forma de aumentar en más de un 30 % nuestra actual capacidad de almacenamiento de agua», explicó.
Agregó que «es cierto que el abastecimiento de energía en nuestro país está asegurado para los próximos tres o cuatro años. Pero nuestro Gobierno también está comprometido con lo que ocurrirá en el futuro. Requerimos no sólo duplicar nuestra capacidad de generación durante los próximos 12 años, sino también energía más económica, segura y limpia».
Asimismo, planteó que «en materia de transmisión, estamos impulsando la creación de una Carretera Eléctrica Pública, recientemente fue aprobada en general en el Senado, que fortalece el rol del Estado en la planificación, definición de trazados y otorgamiento de permisos para levantar líneas troncales de transmisión».
En cuanto a la infraestructura, Piñera explicó que «en cuanto a la carretera Austral entre Puerto Montt y Coyhaique, las obras en desarrollo permitirán pasar de 220 a 315 kilómetros pavimentados entre 2010 y 2014, es decir, en sólo cuatro años habremos avanzado un 40 % del total que había a inicios de nuestro mandato».
Un tema esperado por los estudiantes era el referido a la educación, ocasión en que el Presidente señaló que en lo va de su gobierno se han implementado varios mecanismos para mejorar la calidad y el acceso, afirmando que «sobre estas reformas se había hablado mucho, pero no se había avanzado lo suficiente».
No obstante, la comparación con el gobierno de Bachelet no estuvo ausente y precisó que «todo este esfuerzo, incluyendo el de gobiernos anteriores, ya empieza a rendir sus primeros frutos. De hecho las últimas pruebas Simce muestran que, después de décadas de estancamiento, la calidad de la educación está mejorando y las brechas de desigualdad están disminuyendo».
Igualmente la comparación de resultados y cifras abarcó salud, seguridad ciudadana, impulso a la democracia, entre otros.
El mandatario dijo que su anhelo es el de avanzar hacia la universalidad y gratuidad de la educación escolar, por lo que “en las próximas semanas enviaré una reforma constitucional que establece el kínder obligatorio para todos los niños de Chile”.
Además, precisó que se implementará un subsidio universal para los niños desde los 3 años.
“Es responsabilidad del Estado garantizar un financiamiento adecuado a todos los estudiantes a través de becas o préstamos”, sostuvo.
Explicó que la reforma educacional comienza con la educación preescolar, por lo que “hemos duplicado el presupuesto y la cobertura de kínder y prekínder”.
Añadió que “nuestro sistema educacional, a pesar de los evidentes progresos, presenta problemas, su calidad es baja, su acceso es inequitativo y segrega a los niños, y tercero, impone sobre los hombros de sus estudiantes y familias un costo difícil de llevar”.
Por este motivo, Piñera anunció una reforma a la educación denominada “3×3″ para abarcar calidad, acceso y financiamiento.
En ese sentido, reconoció que “sobre reformas en educación se había hablado mucho, pero no se había hecho lo suficiente”.
El mandatario también dijo que “creemos en una sociedad docente, creemos en la libertad de educar, y de los padres para elegir donde deben sus hijos estudiar”, agregando que el Estado invertirá 14 mil millones de dólares en educación.
“No nos parece justo que con los recursos de todos los chilenos, estemos financiando la educación superior de los jóvenes más privilegiados de nuestro país”, mencionó.
Otro punto abordado por el Presidente en su discurso fue la reducción de la victimización de la delincuencia, anunciando de paso que enviará un proyecto de ley que sanciona como delito los insultos a Carabineros o funcionarios de la PDI.
“En estos últimos tres años hemos logrado reducir la victimización en un 22 por ciento, lo que significa que 300 mil hogares dejaron de ser víctimas de la delincuencia”, dijo el mandatario en su alocución ante el Congreso Pleno en su discurso del 21 de mayo.
A pesar de este logro, Piñera señaló que aún falta mucho trabajo y camino por recorrer para que las familias puedan dormir tranquilas.
Además, destacó el trabajo que realiza Carabineros en su lucha contra la delincuencia y rindió homenaje a los “últimos mártires” de la institución como son Hugo Albornoz, Cristián Martínez y Florencio Arriagada.
En ese sentido, el jefe de Estado expresó que más de 700 policías han resultado heridos por la “acción cobarde y delictual de vándalos encapuchados”, por lo que señaló “que quede muy claro. Este Gobierno no va a tolerar agresiones ni insultos a nuestros carabineros. Por eso, en los próximos días enviaremos a este Congreso un proyecto de ley que establece como un nuevo delito el insulto grave a un carabinero o policía en ejercicio de sus funciones, eleva las penas del delito de maltrato de obra, causando lesiones graves a los miembros de Carabineros o la PDI”.
