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Aumento a $ 210 mil del salario mínimo concita apoyo transversal en la Cámara y la oposición espera que no haya “pillerías”

Aumento a $ 210 mil del salario mínimo concita apoyo transversal en la Cámara y la oposición espera que no haya “pillerías”

Claudia Rivas Arenas
Por : Claudia Rivas Arenas Periodista de El Mostrador @crivasa
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La iniciativa anunciada por el Presidente Piñera, que todavía no ingresa a su tramitación al Congreso, fue celebrada por el oficialismo y también despertó críticas de la Concertación, ya que hay quienes estiman que se llegó a la cifra sólo porque este es un año electoral.


Aunque aún no ingresa a tramitación el proyecto de salario mínimo anunciado por el Presidente Sebastián Piñera el domingo pasado, en el Congreso unánimemente aplauden que el Ejecutivo se haya abierto a aumentar la cifra hasta 210 mil pesos.

Mientras en el oficialismo valoran la idea y en particular el jefe de la bancada de diputados de Renovación Nacional, Leopoldo Pérez, le atribuye a su partido el mérito de que Hacienda haya rectificado la dura posición asumida al inicio del debate, también destacó el respaldo que la nueva cifra tiene desde la oposición y descartó la crítica que ha hecho la Concertación en el sentido de que este inesperado cambio de posición se deba a que estamos en año electoral.

De hecho el abogado DC e integrante de la Comisión de Hacienda de la Cámara, Pablo Lorenzini, quien ratificó que aún no ingresa el proyecto a trámite, se desconoce si será un nuevo proyecto o una indicación al que ya había sido ingresado hace algunos meses, no dudó en atribuir a las campañas la nueva postura de la administración Piñera. Según dijo, esto ocurrió “por una razón muy simple, estamos en campaña y los parlamentarios (oficialistas) sintieron en terreno la presión ciudadana”, aún así manifestó que es positivo, pero aclaró que debe ser retroactivo en su aplicación”.

Por último, dando cuenta de que la tardanza en su ingreso genera suspicacias en la oposición, Lorenzini manifestó su esperanza que no se deba a que “estén redactando pillerías” y lleguen al Congreso con algo difícil de aprobar.

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