«Tengo una muy buena opinión personal de ella (Ingrid Heitmann). En ese sentido yo no tengo por qué dudar de lo que ella está señalando», sostuvo el titular del Minsal.
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, anunció que investigarán los edificios del Instituto de Salud Pública (ISP) tras la confesión realizada por la ex directora de la entidad, Ingrid Heitmann, en relación al hallazgo de dos cajas llenas de ampollas con toxina botulínica, «suficientes para matar a la mitad de Santiago», y que permanecieron en secreto por 27 años en un subterráneo del organismo.
Al respecto, el secretario de Estado sostuvo a La Tercera que «sólo tengo la información que ha sido transmitida por los medios. Cuando asumí el ministerio de Salud trabajamos varios meses con la doctora Heitmann. Pero nunca me lo comentó, de manera tal que debo conversar con ella».
«Yo tengo una muy buena opinión personal de ella, me tocó conocerla también durante su exilio en Canadá y nos hicimos bastante amigos en realidad. En ese sentido yo no tengo por qué dudar de lo que ella está señalando», acotó la autoridad sanitaria.
En ese sentido, informó que la cartera le pidió a la doctora María Teresa Valenzuela, la actual directora del ISP, que haga «una completísima revisión, tomando en cuenta que la doctora Heitmann le describe lo ocurrido como una cosa accidental que se encontró y no vaya a ser que haya más cosas guardadas por ahí».
«Ojalá como lo plantea la doctora Heitmann estos sea solo una cosa del pasado, porque efectivamente la toxina botulínica es una sustancia mortal y los riesgos que describe ella en la entrevista son verdaderos. Hasta que no tengamos mayores antecedentes, no vamos a abrir sumarios sino que continuaremos con la investigación de los edificios del ISP», concluyó Mañalich.
